Y… ¿Qué PASARIA SI GANARA EL INDEPENDIENTE?
Por: Mauricio Fernández Díaz
En la contienda electoral las fuerzas y cuadros que conforman a cada candidato están bastante definidas, por lo que se puede vislumbrar de manera bastante segura como sería el gobierno de llegar el PRI o el PAN a la gubernatura de Tamaulipas.
De llegar el PRI con Baltazar Ochoa su forma de gobierno no diferiría en absoluto de la que hemos tenido durante 85 años, dado que quienes ahora ocupan puestos relevantes en su equipo de campaña como Luis Enrique Rodríguez (a) el “Pipo”, Felipe Garza Narváez, Oscar Luebbert, Amira Gómez , Cecilia Robles, Arnulfo Rodríguez y muchos más de esa pléyade de políticos que han medrado con el erario público por décadas y que seguramente ocuparán, de llegar Baltazar a la gubernatura, desde Secretarias hasta jefaturas de oficinas; o sea, no se puede esperar ningún cambio, solo más de lo mismo, pero recargado; más saqueo, más impunidad, más derroche, más cinismo.
Por su parte, quien se autodenomina el “aire de cambio” o sea Cabeza de Vaca vendría a instalar un Gobierno tal vez con algunos cambios de forma, pero no de fondo; ya conocemos la gerencial forma de gobernar de los panistas, su lado empresarial que predomina por sobre lo social por lo que a todo le ven cara de negocio y oportunidad de invertir pero no de servir; las administraciones municipales que han estado gobernadas por panistas nos dan una idea de cómo sería la administración de Cabeza de Vaca; Su Gabinetazo sería conformado por personajes de la cúpula empresarial, con políticos como Carlos CantuRosas, toda la familia de Ramiro Garza Cantú (Biasi incluido) así como los Elizondo Naranjo (dueño de la cadena de tiendas de autoservicio ARTELI) , el agente aduanal Diego Alonso Hinojoza así como con aquellos que hoy lo están respaldando y con quienes ha realizado ya negociaciones en ese sentido.
Eso de erradicar la corrupción y conformar un gobierno que vea por el pueblo no entra en realidad en el esquema de Cabeza de Vaca; es igual que los representantes de los otros partidos políticos por lo que solo sería cambio de hombres pero no de esquemas.
Del PRD y los otros partidos mejor ni opinar.
La gran incógnita es el candidato independiente Francisco Chavira; hasta donde se sabe no ha hecho alianzas, ni tiene patrocinadores por lo que llegaría sin tener compromisos ni facturas políticas.
El candidato ha expresado que para conformar su Gabinete convocará (de hecho ya lo está haciendo) a los mejores hombres y mujeres del Estado, consciente de que en Tamaulipas sobra la gente valiosa y honesta.
Ha mencionado que será a través de la recepción de sus curriculums y experiencia como elegiría a quienes estarían en la administración; ha precisado que se les respetarían sus trabajos a todos aquellos empleados de gobierno que ya están en nómina, mejorando sus condiciones laborales y expulsando a todos los aviadores para poder llenar esos puestos con gente que en realidad le sea útil al estado.
O sea, un panorama que jamás se ha visto hasta ahora, una administración conformada por ciudadanos honestos, con o sin partido, elegidos en base a su capacidad y experiencia y no conforme a si militan o no en determinado partido político.
Esto abre grandes expectativas; que de entrada proponga darle oportunidad de gobernar a la sociedad civil (a la que jamás se toma en cuenta) ya es un parteaguas, una propuesta novedosa y digna de análisis; Recordemos que los 43 municipios serán repartidos entre las fuerzas políticas del PRI y el PAN y algunos independientes (los menos) y el hecho de que afirme que no tolerará la corrupción y que obviamente tendrá un Congreso conformado por gentes de los diferentes partidos lo que haría un real y verdadero contrapeso en caso de que quisieran caer en lo mismo, da la certeza de que este tipo de Gobierno sería atípico, diferente y podría funcionar bastante bien.
Veremos si la gente se atreve a dar este giro de 360 grados o se queda con más de lo mismo o con un “aire de cambio”.
