Solapa las pillerías del porro Roberto Hernández
La Dra. Puga, la mano que mece la cuna
(PRIMERO DE UNA SERIE)
Las quejas son constantes. Se dice que hostiga, que amenaza, que es corrupto, y le achacan todos los males habidos y por haber.
Y no solo eso, se preguntan si sus antecedentes de presunto porro son suficientes para mantenerlo en un lugar donde no sólo pone en riesgo el dinero que se desaparece, sino también la vida de miles de tamaulipecos que para su mala fortuna viven cerca de los puertos de Tampico y Altamira.
Desde la clandestinidad, “no se puede de otra manera, me matan”, un ex trabajador de la Secretaría de Salud acusa de eso, y de muchas cosas más, al director de la Comisión Federal de Previsión y Riesgos Sanitarios, Roberto Hernández Báez, conocido en el bajo mundo del hampa porril en Tampico como “El Bobby”
Lo señala como presunto corrupto, y de mantener toda una red de personas de pocos escrúpulos lucrando con todo lo que se pueda en un área llamada Sanidad Internacional.
“Por ejemplo, el doctor Juan Jesús Mena Méndez tiene dos empresas una llamada Servimedic y otra llamada Setrimar las cuales funcionan bajo la protección del doctor Roberto Hernández Báez, que es el director de Cofepris en el Estado”, explica.
“Estas dos empresas se encargan de transportar a los tripulantes enfermos para atenderlos de manera particular y no por medio de la Secretaría de Salud, como debiera ser, el pretexto es que sanidad no cuenta con los recursos necesarios para hacerlo, y a decir verdad es que ésta coordinación esta tan abandonada que nadie se apuesto a ver que es un área de trabajo grande y en donde el personal es muy poco, pero a este le conviene, porque entre menos gente sepa de este negocio mucho mejor”.
Las acciones solo tienen un significado, si la denuncia en contra del presunto porro Roberto Hernández se comprueba quiere decir que a las autoridades de la Secretaría de Salud poco les importa que por el puerto de Tampico o de Altamira puedan entrar personas infectadas con virus mortales como el de la gripe aviar, el ébola, u otros que tienen asoladas las regiones de Asia y África.
En la denuncia, quien señala dice confiar en que pronto se tomen cartas en el asunto, ya que de otra manera podría correr riesgos su estabilidad e incluso su vida.
El miedo, dice, es que la banda de “El Boby” no encuentra culpables, y se están desquitando con todos, amenazando a todos, y hostigando a quien sea necesario con tal de mantener ese pingüe negocio que se llama Salud Internacional.
“Es la verdad, andan como locos y no saben con quien desquitarse , no se tienen confianza ni entre ellos mismos, si le buscas tantito todos ellos son una fichita, por cada tripulante enfermo se cobra de seis mil a ocho mil dólares, y las agencias navieras tienen qué pagar, lo aceptan porque se les amenaza con negarles la libre plática que es el requisito para que un barco arribe al puerto, si no se las otorgan cada barco tiene qué pagar entre unos tres mil o cuatro mil dólares por hora, tan solo por ocupar el muelle”.
Para protegerse, dice, en Sanidad Internacional no existe ni un solo reporte médico de algún tripulante enfermo”.
“Es para que no existe huella de lo que no se ingresa o de lo que podría ingresar por la Secretaría por que hospitales hay , médicos y también recursos para curar a cualquier persona, de eso no hay dudas”.
El negocio es tan grande, que según el denunciante alcanza para pagar de 18 a 22 mil pesos mensuales a los trabajadores de más bajo rango que se inmiscuyen en el mismo, que por cierto, todos fueron escogidos de manera escrupulosa.
“Los anteriores verificadores sabían de este negocio, pues a ellos se les daba una cantidad mensual igual a esa, por eso nadie se jubila, sólo basta de que se vea la plantilla del personal y se den cuanta de los años de antigüedad; hay uno que tiene 50 años de servicio y todavía sigue ahí, esas son las pequeñas cosas que se pueden investigar de forma fácil”.
Afirma que para hacer el negocio poco importa de lo que se tengan que valer, de las acciones que tengan qué realizar, y que de acuerdo a los hechos, todo parece indicar que “El Bobby” si tiene la protección de algún poderoso de ésa dependencia.
“Todo esto se empezó a saber cuando el Dr. Mena que fue comisionado a sanidad Internacional ya que su plaza es del Hospital Civil de Madero, lo regresaron pero va a estar de aviador, según esto lo mandan a trabajar los fines de semana pero sólo es de apariencia porque va a seguir operando bajo otro nombre en esa Sanidad Internacional, lo que quiere es deshacerse de todos los que no le entraron al negocio, o pedían más por su participación”.
El acusador dice tener pruebas de que en Sanidad Internacional todo se puede, ya que desde la secretaría de Salud se ordena atender las instrucciones de “EL Bobby” para que no haya problemas a la hora de designar al personal.
“Con la prepotencia de sanidad Internacional ya que su plaza es del Hospital Civil de Madero, lo regresaron pero va a estar de aviador, según esto lo mandan a trabajar los fines de semana pero sólo es de apariencia porque va a seguir operando bajo otro nombre en esa Sanidad Internacional, lo que quiere es deshacerse de todos los que no le entraron al negocio, o pedían más por su participación”.
El acusador dice tener pruebas de que en Sanidad Internacional todo se puede, yaque desde la secretaría de Salud se ordena atender las instrucciones de “EL Bobby” para que no haya problemas a la hora de designar al personal.
“Con la prepotencia de este señor Mena empieza a mover a todos los verificadores que les empieza a estorbar porque como se suponía que no estaba repartiendo el dinero parejo pues le hablaba a “El Bobby” y los cambia de lugar”.
De Mena, la red de complicidades, afirma, se extiende hasta Salomón Sáleme Newman, Subcoordinador de Regulación Sanitaria en Tampico y explica porqué”.
“Porque aparece Salomón Sáleme Newman subcoordinador de regulación Sanitaria en Tampico, pues porque es el compadre de Mena, aparte la esposa de él, la doctora Amparo Ávila Ruiz ya había estado de Jefa de sanidad Internacional y fue con ella que se empezó el negocio, de hecho si se solicitara las tan llevadas y traídas declaraciones patrimoniales no podrían salir bien librados de una investigación, se compraron hasta un rancho en el lado de Veracruz”.
Las cosas, dice, están hasta para presumir que la transa en Sanidad Internacional es concesionada a los cuates, a los amigos, la cantidad, afirma, son unos 30 mil mensuales”.
“El doctor Mena empezó todo al correr a los tres verificadores que estaban anteriormente, de ahí se quedaban los parientes y amigos de Luis Humberto Tamayo Cárdenas que es el coordinador de sanidad al cual Mena le da 30,000 mensuales, eso es lo que se presume en toda el área de salud”.
Hay muchos rumores que no me constan, dice quien señala, pero los da a conocer.
“Dicen que con tal de hacerse su súper amigo les hace fiestas patrocinadas y hasta una novia le consigue cada que se le antoja, son dichos que no tienen nada que ver, son la parte que comenzó todo ya que al correr a los verificadores por presuntas anomalías que son las que ahora se realizan, fue como comenzó todo, hubo un reportaje de todo esto en la televisión, y estoy casi seguro que uno de ellos fue quien dio los documentos y toda la información y tal vez si por que pues, que te quiten de la noche a la mañana el ingreso pues está grueso porque tienen un nivel de vida algo elevado”.De las sospechas de que el mencionado Mena es el que maneja todo el negocio, dice, que hay documentos que lo señalan pero además, que no es posible que tenga el patrimonio de un hombre rico cuando apenas ganaba unos ocho mil pesos a la quincena, por decir mucho”.
“El pobre doctor Mena tiene una camioneta Armada de la Nissan, una Liberty negra, una Cheyene negra de reciente modelo, sus hijos están en la escuela de paga una de las más caras de Tampico, con un sueldo de 8000 a la quincena, está raro no”, se pregunta.
EL MODUS OPERANDI
La situación para los presuntos corruptos,
dice, no es difícil de llevar, menos cuando se cuenta con toda la complicidad de la autoridad.
“Bueno Setrimar se encarga de transportar el personal de sanidad, o sea de la oficina a las terminales portuarias por lo cual cobra 800 pesos aproximadamente por persona y multiplicado por 1800 barcos que según esto entran al año, ya es mucho dinero, y no es todo, además su empresa se encarga de fumigar los barcos por lo cual se cobra 4000 pesos y es realizado por el personal de sanidad pues él no tiene el equipo para hacerlo”.
Se dice, que Mena obtuvo una licencia otorgada por su cómplice “EL Bobby” Hernández, mismo que ni siquiera le solicitó cumpliera con los requisitos para tal empresa, únicamente entregó el documento y listo.
Aquí también valdría la pena revisar un supuesto documento donde se le reasigna las funciones al doctor Mena en el Hospital Civil de Madero, recomienda.
“Si se fija bien, el oficio que muestra Tamayo en la televisión, donde se regresa al doctor Mena al Civil de Madero dice que la petición la hace el doctor Núñez dirigida al Secretario pero este no dice que le es otorgada”.
Lo que valdría la pena, para el acusador, es preguntarle a la doctor Socorro Puga en que situación está la investigación que se hace en contra de todos los cómplices del “Bobby Hernández”.
“Ella dice que será investigado hasta las últimas consecuencias pero la verdad es que no ha venido contraloría a hacer algunas auditorías y existen 3 facturas de Setrimar pagadas por Salud Internacional por transporte de personal y la licenciada en informática Cynthia Guadalupe Soto Cardinault que es, vamos a dejarle en muy amiga de “El Bobby”, las autoriza, ella recibe 5000 al mes por las transas que se hacen, es la administradora cuando ni siquiera tiene conocimientos de contabilidad, ese es otro lado muy extraño”.
Claro que hasta ahí no llega la participación de la señora Cynthia, asegura el entrevistado, también parece ser la culpable de que se encontraran motivos para correr al exadministrador de Sanidad Internacional.“Ella se auto roba un block de facturas para culpar al exadministrador y así poder mover a este de sanidad, el contador la demandó penalmente por difamación”.
Aquí es donde aparece otro personaje, al que solo ubica como Rodríguez Cavazos o Cavazos Rodríguez, y que se supone trabaja en Contraloría de la Secretaría de Salud
