Y ayer finalmente con la participación de unos 190 negocios, entre centros comerciales, departamentales, mueblerías, estéticas, restaurantes, la industria de la construcción, tiendas de ropa, y del calzado, inició el Buen Fin que a diferencia tan solo del año pasado se pudo plasmar los estragos que sigue ocasionado en la economía el Covid-19.
Esto con todo y el adelanto de una parte del pago de los aguinaldos a empleados federales con el propósito de reactivar precisamente la economía, lo cual se pudo constatar en recorrido principalmente en los centros comerciales, en donde los departamentos que se vieron un poco más concurridos son los de electrónica y enseres para el hogar.
Pues aunque el Buen Fin de tener una duración de 3 días, pasó a 9, y recién se acordó que tendrá una duración de 2 semanas por la pandemia para evitar los tumultos, no tuvo el impacto de arranque que se esperaba.
Sin embargo se espera que conforme transcurran los días vayan en aumento las ventas y por ende el número de participantes, sobre todo para el fin de semana que se avecina por que el inicio no ha sido nada alentador.
Es plausible agregar que, en otros pasillos y en las cajas registradoras se formaron las filas, pero se trato más que de otra cosa de quienes los lunes generalmente compran la despensa semanal.
Entre tanto la zona urbana de la ciudad entre locatarios y comercio en general que se ubica en los costados, incluyendo las banquetas se denotó regular actividad comercial.
