Cd. Victoria, Tamaulipas.- Aunque reciben millones de pesos del erario, en última instancia los partidos políticos son bastante austeros, o “codos” con su personal.
Nos referimos a sueldos de los dirigentes y principales colaboradores, en este caso de tres partidos, PRI, PAN y MC que hoy por hoy son los principales en Tamaulipas por su clientela electoral.
Un dato de transparencia nos hace saber que el mero jefe del CDE del tricolor, Sergio Guajardo Maldonado, recibe 45 mil del águila cada mes, y la misma cantidad los secretarios de su comité (de Aida Zulema hacia abajo).
Los subsecretarios se dejan pagar 17 mil y los coordinadores 20 mil.
Quién sabe quién será el secretario particular, pero recibe la suma de 25 mil, según la lista de raya.
El fotógrafo del partido cobra seis mil pesotes y el intendente seis mil 500.
¿Quién les fija el sueldo? No está claro pero debe ser un acuerdo de los dirigentes nacionales.
En la otra esquina, la azul, el salario del jefe “Kiko” Elizondo anda un poquito más arriba, 32 mil cada 15 días (al mes lo doble). Supera con 21 mil a los de su contraparte tricolor.
Los panistas mantienen un sistema tipo “maquiladora” fronteriza. Manifiestan sus pagos por quincena y no por mes.
Según la página de transparencia, A Don Ismael García Cabeza de Vaca, el secretario general, le depositan a su cuenta 23 mil 446 cada quince días (hay que advertir que son en bruto, sin el respectivo descuento para Lolita).
El subsecretario Luis Vanoye Carmona se hace acreedor a 30 mil 600 cada 30 días, lo que significa que gana casi el doble que los subsecretarios priístas.
Como jefe de finanzas, José Hilario González García alcanza 30 mil 750 por quincena (seguimos hablando del PAN), sin compe adicional.
Hay marcadas diferencias en los tabuladores de cada partido. Los priístas son parejos a nivel de secretario y su presidente. Los panistas según el “peso específico” y las necesidades de cada uno (por aquello de si son foráneos).
Así, el abogado oaxaqueño Samuel Cervantes Pérez recibe pagos de 15 mil 810 por quincena. Es el representante del partido ante el IETAM y encargado de presentar decenas de apelaciones, RDC y otros ante los tribunales.
No se sabe el desempeño de Leslie Zárate den Ángel, pero su cobro asciende a 30 mil mensuales (un dato agrega que busca integrarse a la planilla de Carlos García González en el ayuntamiento de Matamoros, de donde es originaria).
Aparte de los principales jefes, aparece Nayely Garza Galván con 28 mil.
De ahí para abajo siguen otros con 21 mil como Elizabeth Aguayo Cerón, Ricardo Cruz Medina con 14 mil y así en forma descendente.
Por su parte los jefes del Movimiento Ciudadano cobran 15 mil, sin distinción, cada secretario, como el señor Horus César García Sánchez, Mario Ramos Tamez y los hermanos Escalante Vázquez y familia.
Otros colaboradores tienen menos, como Rocío Montelongo Betancourt, con seis mil.
Para quien esto escribe lo importante no es lo que gane cada quien, sino que a los jefes les empieza a acomodar eso de la transparencia. Antes por nada del mundo querían divulgar lo que cobraban.
Les falta incluir mucha información, pero algo es algo.
Bueno, a los que cumplen con algo en transparencia. Tenemos que las siglas propiedad de Don Peje López Obrador andan en la era de piedra en eso de la información pública. Están cerrados como las mulas.
Se nos hace que piensan que, el dinero que les da el gobierno, es para que lo gasten en lo que les de su regalada gana incluyendo pachangas, gastos en segundos frentes, hotel y esas cosillas que son menores ante los grandes fines de los partidos.
Sin abandonar el tema de partidos, el Tribunal Federal Electoral le acaba de dar otro revés a los magistrados del Tribunal Electoral de Tamaulipas, en eso de obligar al PRD a cambiar a sus jefes estatales.
Don René Sánchez Rivas y su gente se mostraron muy soberbios al “ordenar” a los órganoS correspondientes que emitieran una convocatoria para dar las gracias Alberto Sánchez Neri como titular estatal.
De sangre azul, Sánchez concedió 30 días para que el señor Neri y socios emitieran la convocatoria, prepararan la elección, llevaran la jornada electoral, hicieran el escrutinio y cómputo, resolvieran conflictos y tomaran la protesta a la nueva dirigencia estatal. Así de exigentes.
A petición de Juan Manuel Rodríguez Nieto y Verenice Murillo Domínguez, la Sala Monterrey del Tribunal le dio con la puerta en la boca (por no decir algo más feo) a Osiris y sus Dorados.
El cambio de directiva del PRD se hará hasta después de las elecciones. Pa’tras los filders con la reculada de Don René.
La tarde apenas empieza. Seguramente vendrán más correctivos para los magistrados.
Por cierto que, en la misma sesión, la Sala Monterrey le dio un bajón de “aquellos” a los de Morena que querían despedir a varios capacitadores y supervisores electorales del INE, como Chegue Salmerón, adscrito al Primer Distrito, Nuevo Laredo.
Los morenos decían que Chegue es priísta, porque hace un chorral de lunas representó a ese partido en una casilla electoral.
Y ya que andamos por los tribunales, ayer decíamos que el INE mandó con cajas destempladas al millonario Francisco Arellano Conde como aspirante independiente a la diputación federal por el V distrito, Victoria.
Bueno, pues el hombre sigue con la gestión de su recurso ante el tribunal, que podría emitir una resolución en los siguientes días. Le podría dar una buena y una mala noticias. La buena es que le den la candidatura; la mala, que no le van a regresar el dinero que le sacaron por “levantar” las firmas. Se fueron con puras copias.
Otro que le prende una velita a la Virgen del Chorrito es Magdaleno Morales Valadés, de Madero. También espera ser candidato por la libre ¿Para qué? ¿Para perder? ¿Para quedarse con el subsidio?.
No entienden. La gente ya no quiere que los políticos le den preocupaciones mundanas.
Felipe Martínez Chávez
