Así anda Tamaulipas:
Por Armando Charles Lumbreras
Un auditor superior, ingeniero, afín al gobernador, aparentemente vigilando el manejo de los recursos públicos de los entes sujetos de fiscalización;…
Una titular de finanzas, ingeniera, y finanzas públicas no sanas;
Un secretario general, no abogado;
Una dimitente ex titular de salud, con profesión no afín;
Un fiscal ‘anticorrupción’ no autómono (dependiente de la Procuraduría cabecista);
Un ministerio público carente, a la vez, de autonomía;
Un espurio sistema de nombramientos de magistrados e integración del Supremo Tribunal de Justicia (casi como en los tiempos de Yárrington, o peor);
Una forma de designación de magistrados del tribunal de justicia administrativa del estado, también obsoleta, antes de su integración;
Una intromisión del Congreso local en la designación del titular del órgano de control del IETAM;
un palacio legislativo, pero no un autentico Congreso;
Una ausencia de garantías al derecho humano de acceso ciudadano a los cargos o empleos públicos, que en todo caso deberían ser elegidos en condiciones generales de igualdad;
Unos órganos electorales administrativo y jurisdiccional no ciudadanizados ni ajenos a las cuotas de partidos políticos;
Unos cargos públicos vacantes, sin justificación alguna;
Una UAT sin democracia, e incapaz de acabar con los ninis;
Un ITAIT con comisionados nombrados o ratificados por egidio, ¿garante de qué?
Una legislación electoral sin democracia plena;
Una violencia e inseguridad, hasta hoy imparables;
Un gobierno continuista, sin cambios de verdad, y
un gobernador, acaso de vacaciones.
¿Qué opinas?
