El proceso de entrega-recepción en Tamaulipas.
DIALOGANDO
Por Roberto Olvera Pérez.
A partir de este mes de agosto habremos de seguir escuchando más formalmente las crónicas o los secretos de las impostergables juntas del proceso de entrega-recepción del gobierno saliente al entrante.
También es muy seguro que estas juntas sean en petite-comité, o sea, de dos o tres personas cuando mucho y todavía con un carácter informal o previo en lugares oficiales y posiblemente en otros sitios que ni siquiera se dan a conocer al público.
El caso de Tamaulipas la palabra alternancia tendrá que explicarse les guste o no a los panistas con las palabras: primer ensayo, primera vez en tiempo real, no viciado, pruebas iniciales, lecturas de ensayo; es innegable que tiene mucho que aprender los que van a llegar para poder recibir el gobierno completo.
Hagamos un repaso a la lista de dependencias y de cargos en lo que tendrán que encontrarse: titulares, adjuntos y auxiliares: en la Secretaría de Finanzas deberán de buscarse pronto expertos en auditoría interna para que al mismo tiempo que reciban también entiendan los procedimientos de registro y control en áreas bien importantes, como participaciones federales, impuestos sobre alcoholes, licitaciones de obras públicas, compras consolidadas, deberán saber de obras pendientes aun no entregadas, bitácoras de obras en proceso y la lista de subsidios que entrega mensualmente el gobierno del estado a organismos, instituciones, patronatos, juntas e instituciones de carácter social, en algunos casos conocidas solo en los libros de contabilidad; sin olvidar los estados financieros de las oficinas fiscales durante todo el último año, comprendiendo a fondo el origen y destino de cada partida.
Hay que echar mano de los que conocen el antecedente, de los que saben que se deja de pagar y desde cuando, o quien recibió dinero con nombres supuestos en ciertas instituciones.
Como hemos dicho en otras columnas anteriores, aquí “prevalece lo no escrito”, pero hay viejos servidores públicos de otras administraciones que conocen como se les dio vuelta a ciertas cosas.
Se debe de recurrir a los que saben muy bien que se hizo y que se dejó de hacer en cada ramo. Urge revisar: el estado de cuenta del Fondo de Desastres Naturales (FONDEN); el estado de cuenta de la comisión relacionada con los incendios forestales y el estado de las áreas naturales protegidas como el Cielo por ejemplo.
Las cuentas de Banobras sobre el pago de obras municipales inconclusas, como el mercado municipal de Tampico y obras viales en Altamira, en donde el gobierno del Estado es el primer aval que sabe de estos detalles, como los nombres de los que saben y de los que puedan dar el ancho para arreglar todo esto en los temas de las ya muy próximas juntas de la entrega-recepción y como siempre se aplica la sabia frase que dice: “Que no están presentes todos lo que son y que no están ausentes los que tampoco deberán estar. No están todos los que son, ni son todos los que están obligados a dar cuentas”.
En fin esto se hace para que las cosas se hagan a modo del que quiera y como lo quiera ver y escuchar para privilegiar amigos o gentes cercanas, por lo que veremos en unos días hasta donde se llega en la realidad.
Sería nefasto olvidarlo todo, sería también una total impunidad entenderlo así; máxime cuando Tamaulipas a pesar de todo sigue conservando el prestigio o la esperanza de tener finanzas sanas, lo más peligroso es que nos hagamos de la vista gorda y terminemos igual que Coahuila y Nuevo León, que actualmente tienen una deuda cuatro veces mayor a la de nuestro Estado. Sino cuidamos en esta en la próxima etapa será la de nunca acabar y todo a deber.
Es lamentable que después de tantas experiencias que se han vivido en Tamaulipas, no tengamos una legislación clara y moderna sobre este tema y mientras se siga así no tendremos cuentas claras al momento de cambiar titulares de las dependencias estatales.
Es momento de anotar otra asignatura pendiente que podrán empezar a pensar los que llegan al Congreso del Estado de Tamaulipas.
NOTAS CORTAS
1.- En estos tiempos de tantos cambios en donde se manejan hombres de todos tamaños, vale la pena recordar que el Rector General de la UNT, el MBA José Francisco Chavira Martínez, ha sido el único tamaulipeco en el ramo de la educación que no hace mucho ha recibido un reconocimiento de la Casa de la Cultura de Tamaulipas en el Distrito Federal, en donde solo opinan los que han vivido y saben comparar los hechos y las acciones realizadas en las últimas tres décadas en nuestro Estado. No hay que olvidar a los GRANDES en estos momentos en donde se buscan buenos relevos.
2.- No me lo crea pero se dice fuerte y quedito que cuando dejen el cargo de gobernadores de Veracruz, Chihuahua y Quintana Roo, o sea, Javier Duarte de Ochoa, César Horacio Duarte Jáquez y Roberto Borge Angulo, serán sometidos a un juicio político en el CEN del PRI y la posibilidad de que sean expulsados.
Por hoy es todo, en la próxima seguiremos dialogando del acontecer político tamaulipeco. robertoolvera-mt@hotmail.com