Estado

El PRI y el librito de Sun Tzu

ESCENARIO POLÍTICO

Marco Antonio Torres de León

En El Mante el horno no está para bollos.

Y una vez conocido el nombre del candidato a gobernador, los aspirantes a la alcaldía y diputación local se lanzan en pos de su sueño, buscan ganar las candidaturas en disputa.

En este caso, la alcaldía del Mante y en segunda instancia, la diputación local.

Por un lado está RIGOBERTO RODRÍGUEZ RANGEL, quien apostó al proyecto de BALTAZAR HINOJOSA OCHOA, una vez que MARCO ANTONIO BERNAL se bajó de su exangüe caballo a mitad de la carrera, en la precampaña interna del PRI.

Sabedor que nada haría ante Baltazar Hinojosa Ochoa y su gran padrino e impùlsor de Los Pinos, Enrique Peña Nieto, el matamorense Marco Antonio Bernal le fue cediendo hombres (y simpatizantes) a su amigo matamorense Baltazar, quien vió crecer su proyecto con efecto bola de nieve.

Rigoberto Rodríguez Rangel no cabía en sí de regocijo el día que Baltazar Hinojosa fue elegido candidato.

Al día siguiente iría a ciudad Victoria para apersonarse -junto a la clase política más selecta de Tamaulipas- para felicitar al eventual candidato a gobernador.

Aprovechó para tomarse la foto con él, misma que publicó en Facebook.

Rigoberto Rodríguez es de hecho uno de los primeros aspirantes a la alcaldía del Mante que se sumó a Baltazar abiertamente, aunque la muda no se haya notado mucho, volviéndose casi imperceptible.

Quien por su parte no quita el dedo del renglón, tampoco, es la ex diputada federal ROSALBA DE LA CRUZ REQUENA, apelando a la equidad de género como principal argumento.

En entrevista con la periodista Patricia Pérez Cruz declaró que “la convocatoria habla de la igualdad (de género) y eso es lo que esperamos, que en justicia se haga realidad, y que esto nos dé la oportunidad de contender por la presidencia municipal”.

También sostuvo que una vez publicada la convocatoria del PRI, “Reafirmo mi intención de ser parte del futuro del Mante”.

Dijo que “estamos listos, y dispuestas a hacer la unidad que el partido necesita”.

“Estoy lista y y listos como equipo para trabajar primero por nuestro ya precandidato Baltazar Hinojosa a quien consideramos una buena carta en el partido”.

Declaró además: “Estoy lista para lo que viene para el Mante”.

“Se espera (del PRI) que cumpla con la igualdad de género, que es algo que las mujeres durante muchos años han trabajado y demandado”. Dijo que “desde el 2015 hay una ley que así lo prevé. El derecho político hoy nos marca que las mujeres vayamos en igualdad de condiciones a buscar un puesto de elección popular”.

Debido a eso, declaró, “sé que mi partido hará lo propio y que esto hace que que tu servidora, eso haya sido uno de los puntos que tomó en cuenta para participar, saber que las mujeres estamos en igualdad de circunstancias”.

Por su parte, JOSÉ REYES GUEVARA SERVÍN tampoco quita el dedo del renglón, intensifica sus acciones y agudiza sus sentidos para buscar estar en el lugar correcto, a la hora correcta, con los padrinos adecuados y en su cita exacta con el destino, cita que espera lo favorezca a él y a su proyecto político.

JULIO CÉSAR PORTALES MARTÍNEZ también hace lo propio, sabedor que de cara al futuro es una de las cartas más prometedoras del Mante; y que tarde o temprano conquistará su sueño de gobernar El Mante o bien, ser diputado local o federal.

Esto, pese a sus 38 años de edad, edad joven para los anteproyectos políticos que se avecinan a su vida.

Julio Portales cuenta con un palmarés envidiable, amén de que es el hombre del momento en el presente trienio, a nivel municipal. Además de ser diputado federal suplente de Alejandro Guevara Cobos

Ahora bien, en política se abre un abanico de opciones en este ciclo sucesorio.

Y como dice la canción, la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida.

Y para el presidente municipal PABLO GONZÁLEZ LEÓN se presenta la oportunidad de su vida, ser candidato a diputado local por el distrito con cabecera en El Mante.

Hace días, distinto a lo manifestado hace más de 3 o 4 meses, en donde negó abiertamente tener interés por contender por la diputación local, dijo a la prensa que “ni me encarto ni me descarto” para buscar ser diputado local por su distrito.

Respuesta que gustó a sus simpatizantes. Muchos catalogaron esto como un aval o señal positiva en su carrera.

Y es que PABLO GONZÁLEZ LEÓN es un político probado en las urnas, un auténtico león que sabe atraer simpatías como imán al hierro; tiene el capital político vigente propio, latente, vivo, y los 32 mil 500 votos a favor obtenidos hace 2 años cuando fue candidato a alcalde, resuenan fuerte en los oídos de los que toman las decisiones.

La moneda está en el aire, pues.

Es probable, de hecho se percibe en el ambiente que Pablo González León podría dejar la alcaldía para registrarse como candidato a diputado local, poco más allá de mediados de febrero.

Pasemos a otro asunto.

Nada de lo que sobrevendrá en la campaña a gobernador de Tamaulipas en el PRI será fácil.

Menos teniendo como antagónico a semejante animal político como es Francisco Javier García Cabeza de Vaca.

Con tanto muerto tirado en el camino, no podemos pensar otra cosa.

Cayeron seis ese día, todos de un junto. El mismito día de la asunción del matamorense Baltazar Hinojosa, quien de todo lo ocurrido fue el menos culpable.

Era el elegido. Y nadie tenía nada que hacer frente a él.

Máxime porque para su fortuna, tuvo -desde siempre- el dedo favorecedor del presidente Peña Nieto a través de su real padrino, Luis Videgaray, Secretario de Hacienda.

Pero créalo, no todos -los seis aspirantes a la gubernatura- cayeron con la cara al cielo; algunos creen haber muerto con un tiro por la espalda, traicionados.

Como por ejemplo Enrique Cárdenas del Avellano, hijo del ex gobernador de la década de los setenta, quien enfurecido se rebeló a la decisión..

¿Por qué se sintieron traicionados? Simple, porque no creyeron que la democracia brilló por su ausencia.

Hubo disciplina partidista, cierto, pero también desazón y decepción.

Hubo sumisión a la figura presidencial, sí, pero también dedazo.

La tan cacareada democracia en el PRI estuvo ausente en la elección interna tricolor.

Dos ejemplos, el mantense ALEJANDRO GUEVARA COBOS fue uno de los damnificados de ese día pues confiaba que la selección del candidato se haría apegada a los resultados de encuestas sin sesgo ni favoritismos; y sopesando con justicia el trabajo en territorio de cada aspirante.

Alejandro Guevara fue uno de los aspirantes que más trabajó en Tamaulipas, pisando territorio y convenciendo a las masas.

Alejandro sintió desazón, sobre todo cuando supo a los tres días de decidirse el caso Tamaulipas, que en Oaxaca el PRI nacional ungía como candidato a gobernador a Alejandro Murat, su amigo, al que tantas veces citó diciendo: “Alejandro Murat y yo somos una generación nueva que está ocupando altos cargos en los estados, incluso como gobernadores; somos una nueva generación de jóvenes que triunfa”.

Palabras más, palabras menos eso solía decir antes de acercarse el tiempo de las decisiones.

Pero llegó la hora de abrir los ojos. Y la realidad fue penosa, triste.

‘Pa atrás los filders’.

Alejandro Guevara realmente creyó que la elección interna en el PRI iba a ser democrática y que la decisión, por justicia, le favorecería en primera instancia.

Todo fue una falsa obra teatral, un falso montaje.

Un aborrecible dedazo.

Lo peor fue que algunos aspirantes a la gubernatura se prestaron a la farsa.

Una de esas figuras obsoletas que se prestaron al juego vicioso de tender cortinas de humo fue PALOMA GUILLÉN VICENTE, quien no logró conformar siquiera un minúsculo grupo compacto de trabajo.

Sin idea engañó a sus seguidores quienes llegaron a pensar que iría de verdad en busca de la candidatura. Jamás fue sincera ni honesta. Menos habló con la verdad.

Sin operadores, sin proyecto, sin estrategia definida, sin agenda, así salió del partidero Paloma Guillén la hermana del Sub Comandante Marcos, supuestamente porque buscaba ser candidata a gobernadora.

Falso. Paloma no fue sino mera figura decorativa.

Manlio Fabio Beltrones en realidad, quedó aplastado por el presidente ENRIQUE PEÑA NIETO y la mayoría de los aspirantes consideran que sus decisiones fueron unitarias, absolutas.

Nos referimos a las decisiones del presidente, por supuesto, no a las de Manlio Fabio, un cero a la izquierda en el caso que nos ocupa.

La decisión la habría tomado Peña Nieto largos meses atrás.

Por ende cabe preguntar, ¿Si lo decidió con tanta anticipación, por qué creó la pantomima del juego parejo y de la contienda interna, a ver quién superaba a quién y a ver quien garantizaba el triunfo del PRI?

Se habría ahorrado dinero, tiempo y esfuerzo (sorna).

Se esperaba más dramatismo y episodios. Episodios que hicieran creer al priismo tamaulipeco que su proceso de selección interna de candidato a gobernador era real, no simulado.

Esa farsa causó molestias en seis aspirantes, como colofón de la historia.

Molestia tal que puede -aún a éstas alturas- provocar un cisma en el PRI, pese a los desesperados llamados a la Unidad que están haciendo los líderes del partido.

Bien, por ahora es todo, nos vemos pronto.

Posdata: Aunque por último ahí le van algunos datos sueltos, frases que sin pretenderlo parecen actuar como fotografías del momento.

Dicen que la aquiescencia política del PRI de Tamaulipas está asustada en grado superlativo, frente al fenómeno Cabeza de Vaca y los peligros que éste pueda representar.

Y que para eso está tomando providencias, haciendo amarres con priistas de todos los tiempos, desde aquellos de viejo cuño, hasta los noveles.

El PRI los quiere a todos dentro.

Está consciente que en los números, es casi imposible que el PAN supere al PRI, pero cabe la posibilidad que en la guerra, algo se salga de control y el enemigo tome ventajas.

Y es que el reynosense no se anda por las ramas a la hora de retar. Lo acaba de hacer en rueda de prensa y aparentemente lo seguirá haciendo.

Eso está obligando a BALTAZAR HINOJOSA a dejar su rol pasivo; y poniendo a prueba su capacidad de reacción. Aunque ninguno de los dos sea candidato oficial aún.

Es por eso que el PRI convocó a la vieja clase política magisterial en las personas del profesor ENRIQUE MELÉNDEZ PÉREZ, ex diputado federal y luego candidato a diputado federal por el Partido Nueva Alianza. Siempre por el Sexto Distrito.

También convocó al viejo líder HUMBERTO HINOJOSA OCHOA, prácticamente en retiro y al profesor neolaredense ARNULFO RODRÍGUEZ TREVIÑO.

Fuentes confiables nos dicen que Enrique Melendez Pérez vuelve por sus fueros en este caso en calidad de bombero, por supuesto a favor de la causa de Baltazar.

El Oso también. Y Arnulfo igual. Irán en busca de todos los cabos que anden sueltos y jugarían un rol parecido al de “apacentadores de ovejas”, que sepan meter a todos los rebeldes a un solo carril.

El PRI sabe que Cabeza de Vaca es un fajador que gusta de golpear al enemigo.

Y aunque al candidato del PRI le conviene trabajar más en su territorio, omitiendo lo que hagan o dejen de hacer sus rivales, aparentemente su enemigo del PAN confunde los roles e insiste en pensar que una campaña política es un ring literal.

Por último, algo hace sospechar que el registro de último minuto de KIKO ELIZONDO es en realidad una carta usada por el tricolor para intentar causar un cisma entre panistas. Y de no ser así, al menos si es lo que el tricolor desea, desunir.

Obviamente ningún alto mando del PAN puede impedir que Francisco Elizondo Salazar se registre.

Aunque no falta quien diga que se trata de una confabulación entre Cabeza de Vaca y el propio diputado local, en vista de que ambos son amigos.

Amén de esto, ha trascendido que el PRI recurrirá -y está recurriendo- a otras estrategias de guerra conocidas desde los tiempos de Sun Tzu para debilitar al enemigo, trazadas por este en su obra maestra El Arte de la Guerra.

Y la más importante de ellas es una estrategia llamada, divide y vencerás.

Bien, es todo ahora sí. Hasta pronto.

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