VIDA DIARIA
Por; Rosa Elena Gonzalez
¿Quién es DON CHUY?, pues hasta ayer un completo desconocido para los mexicanos y hoy el hombre más famoso gracias a su osadía y salto mortal que lo catapulto al estrellato de las redes sociales, qué locura.
No cabe duda que andamos mal, que el morbo mueva más que las buenas acciones, pero así es la naturaleza humana y hoy que se está escaso de situaciones que valgan la pena resaltar, o donde la gente se tenga que congregar, se cae en la inconsciencia de aplaudirle a quien atenta contra su vida para llamar la atención.
Eso sí, nadie puede negar que DON CHUY tuvo más convocatoria que cualquier político, la gente voluntariamente, aunque no por buena voluntad sino por morbo, se congregó en torno a él, razón por la que en son de broma en las redes sociales aparecen memes con la leyenda “Don CHUY para Gobernador”
Lo grave es que es que la fama de DON CHUY le durará menos que el dolor por los golpes y las consecuencias que estos le traigan, el arrepentimiento por su mala acción llegará apenas se le pase la euforia y los efectos de las sustancias o bebidas que haya consumido y créame, nadie, absolutamente nadie le prestaran atención, al contrario le echaran en cara su mala acción.
Más triste es la situación cuando una amenaza de suicidio termina convirtiéndose en show, deja en evidencian que no hay estrategia por parte de los cuerpos policiacos y de protección civil para salvaguardar la vida de las personas que se encuentran en el lugar y del mismo suicida, ellos, los de protección civil, alegan que tienen que tener el permiso de los familiares para actuar, ¿será más importante el show que las vidas humanas?
Mientras el hombre amenazaba con quitarse la vida con un machete y una piedra, además de tirarse al vacío, nadie hizo nada, eso sí es realmente grave porque lo que la gente al inicio vio con consternación y luego se convirtió en show, pero pudo terminar en una tragedia mayor y donde los soldados y protección civil solo fueron mirones esperando el desenlace de los acontecimientos para actuar, es para la reflexión.
Amén de que no existen estrategias oficiales, sin duda alguna los estudios del comportamiento humano más acertados en ocasiones fallan, las acciones de los hombres responden a diferentes circunstancias que no necesariamente son los que los psicoanalistas determinan, pero algo deben conocer de eso.
Los mismos psicólogos en repetidas ocasiones han manifestado que cuando una persona amenaza con quitarse la vida, lo hace más que con la intención de llamar la atención, lograr un objetivo.
Y seguramente la hipótesis es acertada en la mayoría de los casos, el problema es que cuando las personas se sienten acorraladas y se ven obligados por las circunstancias, o por la misma multitud que le grita que no es capaz de quitarse la vida, quien amenaza con hacerlo termina por realizar la acción o al menos intentarlo más veces, atentando contra su integridad física sin medir las consecuencias.
Para ellos, los desequilibrados que momentáneamente amenazan con quitarse la vida, en su inconsciencia también se convierte en una cuestión de honor cumplir con la amenaza cuando ven que su palabra está en entredicho, que la gente duda que tenga el coraje para hacerse daño, por eso termina por hacerlo, claro, muchas veces esperando no tener mayores consecuencias y que sirva de referente para que en otra ocasión crean en lo que dice.
Triste, pero seguramente justo eso fue lo que le sucedió a DON CHUY, más que valor o ganas de hacerlo fue la presión social lo que orillo al personaje que ayer al medio día amenazaba con quitarse la vida a terminar lanzándose de la azotea de su casa. Es para reflexionar que clase de sociedad estamos formando.
El hombre que se encontraba en la azotea de su casa de dos pisos, durante más de dos horas, amenazó con quitarse la vida si no le cumplían sus peticiones, los curiosos, medios de comunicación y familiares se congregaron para dar cuenta de lo que estaba sucediendo con DON CHUY que amenazaba pero no se animaba y la gente comenzó a gritarle que no lo haría.
Le cumplieron las peticiones al hombre pero el seguía amenazante, luego, cuando fue despojado del machete y que no lo sujetaron, el hombre se sintió acorralado, quizá se encontraba bajo los influjos de alguna sustancia, no midió las consecuencias y se arrojó al vacío, claro, analizó bien el terreno, no se lanzó al pavimento, salto al césped pero igual existía el riesgo de fracturas graves.
El caso de DON CHUY se volvió viral en las redes sociales, su acción fue topen nacional, el hombre tuvo su momento de fama, hasta se dice que tiene más arrojo que muchos aspirantes a gobernador porque él sí supo cómo y cuándo lanzarse.
En fin, la situación es que Don CHUY saturó las redes sociales después de que amagara con quitarse la vida con un machete y después de ser desarmado se arrojó de una altura de aproximadamente 6 metros provocándose golpes internos y externos de consideración, con eso hace dos días logro ser el más famoso, hoy seguramente el más arrepentido y adolorido, lo único que tendrá de consuelo es que en el ciberespacio hay leyendas que dicen “DON CHUY para Gobernador”
