POSDATA
GASTON ESPINOSA GLZ.
El 2015 dejó un ambiente enrarecido en la política estatal. Al cierre del año se contabilizaban hasta ocho aspirantes del PRI al Gobierno de Tamaulipas; para este año es indudable que solamente quedan tres: Baltazar Hinojosa, Alejandro Guevara y Marco Antonio Bernal.
Varios se quedaron en el camino decembrino. Se perdieron entre libros, corto circuitos, posadas y falta de ganas. No aguantaron siquiera el cierre del maratón Lupe-Reyes. Atrás se quedaron los nombres de Edgar Melhem, Ramiro Ramos, Paloma Guillén, Alejandro Etienne y Enrique Cárdenas del Avellano.
De los tres que restan, uno de ellos ha sido blanco de “fuego amigo” todo por culpa del maldito sospechosismo que suele ser recurrente en tiempos de elecciones. Baltazar ha procurado no caer en provocaciones y se ha mantenido al margen de la polémica.
Como diputado federal obtuvo una de las comisiones más importantes dentro del Congreso de la Unión, la de presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, que lo convirtió en automático en alfil del Secretario de Hacienda, Luis Videgaray. El matamorense por su parte ha establecido pactos con los grupos de poder económico del norte y sur del estado.
Su posicionamiento en el estado avanza pese al golpeteo permanente en algunos los medios impresos, digitales y radiales. No han podido debilitarlo.
Por otro lado al que le va bien en los medios es al ex comisionado para la paz en Chiapas, Marco Antonio Bernal Gutiérrez, a quien su staff de prensa presenta como un “tamaulipeco distinguido que desde diversas tribunas ha contribuido al progreso de nuestro estado”.
Su posicionamiento mediático ha ido creciendo, lo que debe ser un facilitador para que la ciudadanía le recuerde en caso de que el Partido Revolucionario Institucional lo designe candidato a gobernador y es que luchar contra el desarraigo es complicado y menos cuando es a contrarreloj.
La otra opción que tiene el PRI se llama Alejandro Guevara Cobos, que con su lema “Seguridad para tu prosperidad” ha logrado ganarse la confianza de la ciudadanía al ser el único de los aspirantes priistas en tocar frontal y proponer acciones que contribuyan al mejoramiento de la seguridad.
Los foros que realizó sobre el tema atrajeron la atención no solamente de los empresarios, -sector altamente afectado por la inseguridad- sino que atrapó a todo tamaulipeco interesado en contar con una entidad segura. Y desde la comisión de Seguridad y Marina a las que pertenece Alejandro seguramente van a desencadenarse una serie de acciones tendientes a garantizar certeza.
Alejandro se resume en dos palabras. Constancia y Tenacidad.
A semanas de que el PRI elija candidato al gobierno del estado sólo quedan tres opciones viables: Baltazar y esos señalamientos escabrosos; Marco Bernal y su peliagudo desarraigo así como Alejandro Guevara y su bandera contra la inseguridad.
BROTAN LAS MOLESTIAS EN EL PRI
Al PRI debe inquietarle las constantes manifestaciones de inconformidad que se están dando en algunos seccionales que tradicionalmente marcaban la pauta ganadora del partido.
Por doquier brotan las quejas y el malestar por la apatía que el priismo y sus principales representantes muestran ante el problema. ¿De quién es la culpa?
Quizá del jefe político local? O acaso del representante del gobernador en la ciudad? o sin duda podría endilgarse el asunto al presidente del PRI municipal?
De cierta forma cada uno de ellos tiene responsabilidad en lo que pasa, ya sea por acción u omisión.
Lo que queda claro es que el único beneficiado con todo esto es César Augusto Verástegui Ostos y su patrón, Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
El panismo ha capitalizado el enojo de la base priista. No en balde los seccionales que se ubican en la Linares, Nacional Colectiva, Jesús Yurem y la Victoria, están comiendo de la mano del famoso “Truko”.
Si no se corrige el rumbo y peor aún, si no hay una buena elección de candidato, el PRI corre el riesgo de caer en las urnas. Si quienes pueden enmendar la situación adversa por la que atraviesa el partido siguen montados en su pleito personal y solo llevan agua para su molino, el escenario será complejo.
Trabajarán como uno solo? El tiempo apremia.
PD: El único que puede acabar con el PAN y su famosa alianza ciudadana despacha en el PRI. Rigoberto Rodríguez Rangel sería factor para que el proyecto de Truko y Cabeza de Vaca se diluya como pompa de jabón. El tema salió de la CTM, distrito de riego y del propio César Verástegui. Le tienen respeto.
