Cuatro menores de edad que vivieron en el albergue de Rosa María Verduzco Verduzco, mejor conocida como “Mamá Rosa”, se suicidaron por diferentes traumas.
“Se han suicidado cuatro menores desde que ocurrió esto (la intervención al albergue)”, informó Julio Hernández Barros, comisionado de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), un organismo descentralizado del gobierno.
Explicó que “la mayoría (de los suicidios) ya en sus hogares de donde son originarios y, como nos reportan los propios familiares, como secuela de los daños psicológicos que les produjo el internamiento en esta casa hogar. Estamos investigando esos casos”.
Del último menor que se quitó la vida se tuvo reporte esta semana, informó la titular del fundación “”Y Quién Habla por Mí”, María Ampudia, quién junto con varias personas que habitaban en el albergue, acudió a la CEAV para denunciar los abusos que sufrieron.
Ampudia señaló que “No pudimos llegar a tiempo con uno de los pequeños que iban a venir: se suicidó, se colgó, un chico de 11 años. Es una tristeza que a este pequeño no se le haya dado la oportunidad de resarcirse. Estamos tristes, de luto”.
En tanto el comisionado de la CEAV, Hernández Barros dijo que a algunos de los niños que se encontraban en el albergue de La Gran Familia les fue robada hasta su identidad y sus documentos oficiales como acta de nacimiento están desaparecidos o no existen.
“Ni siquiera ese derecho tan básico como el de la identidad fue respetado en ese albergue”, indicó Hernández, quien se encarga de localizar actas de nacimiento y a las familias de quienes no tienen un expediente.
El comisionado y otros funcionarios de la CEAV se reunieron con víctimas de La Gran Familia, lugar que durante 60 años dirigió “Mamá Rosa” y que el 15 de julio de este año las autoridades federales intervinieron.
“El albergue mostraba una máscara maravillosa, pero abrías una puerta y encontrabas una cloaca con condiciones infrahumanas”, enfatizó.
(Con información de Reforma)
