Egidio no destapa gallos; pero Javo se posiciona
ESCENARIO POLÍTICO
Por Marco Antonio Torres De León
Más que buscar la noticia entre lo visible y lo tangible tras la visita del gobernador Egidio Torre Cantú ayer, fue pertinente buscarla en los detalles, anécdotas y en los hechos inesperados, que sí hubo y bastantes.
De por sí el gobernador no sabe mandar señales al priismo para despejar dudas, vaya, no despeja dudas ni propias ni ajenas.
El es ingeniero no sociólogo, es constructor no comunicador, construye edificios, no hace caritas felices.
Lo suyo tampoco es destapar gallos, nunca se le dio.
Digamos que Egidio Torre Cantú es un gobernador pragmático, apegado al librito de las ‘cero bromas’ y cero chacoteos mientras usa el templete, como solían ser expertos en ese arte Tomás Yarrington y Eugenio Hernández Flores, sus antecesores, señores del juego verbal, del sofisma y la dialéctica.
El sofisma yarrintoniano y geñista eran recursos que este par de sinverguenzas usaban para aclarar, confundir o hacer dudar más a las masas.
Usaban los sofismas para divertirse.
Defendìan con aparentes verdades lo falso, refiriéndose tanto a sus programas de gobierno, proyectos, anteproyectos, así como a sus amigos consentidos.
Los sofismas de Eugenio Hernández no tenían parangón.
Siempre daban risa, y daban de qué hablar. Era como si al pueblo hubiera llegado el mejor payaso de la comarca, popotín y popotón, los parientes de Cepillín.
Eugenio Hernández siempre trataba de hacer pasar lo falso por verdadero y a mitad del discurso lo pillaban sus oyentes.
Quedaba expuesto a media interlocución.
Con aquélla verborrea el pueblo no ganaba pero cómo se divertía.
Pues bien, aquellos juegos verbales jocosos ya pasaron de moda.
La fraseología de este par murió.
Esta vez le tocó a Egidio Torre Cantú marcar su línea t definir su estilo.
Para empezar, repetimos, Egidio no aclara dudas ni da chismes de vecindad, ni noticias de tv novelas.
Sobrio, callado, sonriente y sobremanera relajado, cumple el axioma, entre más callo, más verdades digo.
Usa las reglas básicas que debe tener todo gobernador cuando quiere airoso de retos frente al público, hablar estrictamente lo necesario.
Ya pasó el huracán que al gobernador lo llevó a ser objeto de columnas crueles y matadoras que casi lo postran tres metros bajo tierra.
Aquéllos bombazos mediáticos casi lo dejaron moribundo.
Pero como el refrán dice, golpe que no mata fortalece.
Su imagen resurgió como el ave fenix.
Aunque las estadísticas sigan oliendo a muerte.
El presidente Peña Nieto le corrigió la plana hace dos meses y envió centenares de marinos y soldados del ejército, quienes llegaron a Tamaulipas a apagar fuegos.
Con eso Tamaulipas pudo respirar medio tranquilo. Y la clase política también.
Por otro lado, el tema que nos ocupa ahora, tras la visita del gobernador ayer, es la siguiente: ¿Quién de los seis o siete políticos candidateables a la diputación federal del sexto distrito aprovechó el día y se llevó rabo y oreja?
Hagamos la lista, compuesta por seis mantenses.
Que sin más preámbulo son, Rigoberto Rodríguez Rangel, Rafael Méndez Salas, Javier Villarreal Terán, José Reyes Guevara Servín, Fanny Rodríguez y Alejandro Guevara Cobos.
Para empezar al lídel del SNTE de Tamaulipas Rafael Méndez Salas se vio aislado, solitario.
Se le vio además como dice José Feliciano, aturdido y abrumado, por la duda de los celos…
No había a su lado perrito que le ladre. No había quien lo viera, ni quien le sonriera.
Aparentemente era su gran día, pero como en Mante Rafael Méndez Salas no conoce a nadie, ni nadie lo conoce a él, este prohombre del SNTE pasó inadvertido, como expreso de medianoche.
Acabó siendo desplazado indiscretamente en el templete del instituto tecnológico Mante por Diódoro Guerra, quien ocupó su lugar, siendo el hombre más cercano al gobernador.
Al fin fue lo que el gobernador ordenó: ‘Quitenlo de aquí y que se ponga Diódoro (Guerra) en su lugar’.
Alejandro Guevara Cobos por su parte, no se vieron ni sus luces.
Aunque no fue invitado, ni tampoco iba a venir, lo incluimos en la lista por ser un aspirante más a diputado del sexto distrito.
Alejandro Guevara Cobos es odiado por el gobernador, quién pintó su raya de él por grosero, majadero, bocón y troglodita, aparte de proxeneta y cuenta chiles pues hace campaña proselitista en Tamaulipas con dinero ajeno, proveniente de manos extrañas.
Ya lo investigan.
Dice él que es dinero de sus amigos ex gobernadores y funcionarios.
Por eso en la fiesta de ayer nadie lo vio llegar, porque opera a su conveniencia, solitario y de noche, bajo sombras de oscuridad.
Es como los coyotes, aúlla con la luna llena.
De él dice el compositor, ‘coyote coyote altivo que no respetaste amores, pudiendo ser buen amigo te mataron tus traiciones’.
Aparte de todo eso Alejandro Guevara es un declarado sibarita, hedonista, lunático y trastocado en su psiquis personaje, que acostumbra apartarse para comer.
Ciertamente es un sibarita, pero tiene un grave defecto: cubre sus caros gustos con dinero ajeno, no propio, el colmo de la desfachatez.
Para quienes no saben, según la definición de Wikipedia, un sibarita es ‘una persona o grupo urbano, de gustos refinados. La etimología de este término deriva de la ciudad italiana de Síbari, que en la antigüedad era famosa por la exquisitez de sus habitantes.
‘Actualmente, las inclinaciones de los sibaritas son a productos de alta calidad: alimentación, tecnología de cara a la galería, coches, moda, etc.
‘Por lo general, son personas con alto nivel adquisitivo familiar. Algunos pueden tener hábitos y costumbres como ostentación de su poder adquisitivo endeudándose continuamente (llamados coloquialmente «pijos» en España,«chetos» en Argentina ), lo cual suele ser una generalidad. Suele ocurrir con coches y ropa, pero suelen ser gente con amplios conocimientos en marketing y desean la máxima lucidez por cuestiones estéticas’.
Mas volvamos al tema que nos ocupa, los enlistados.
Javier Villarreal Terán estuvo presente en el acto y alzó su mano en señal de presente.
Ocupó un lugar preponderante en la mesa de los invitados al almuerzo en la Cafetería Mante, epicentro del terremoto ocurrido ayer en el sexto distrito.
Momentos antes el propio gobernador Egidio Torre Cantú lo había acercado literalmente a donde estaba él diciéndole: ‘Ven Javier, hazte para acá’.
El anfitrión del desayuno-almuerzo fue Pablo González León y estuvieron todos sus invitados, unos cinco o siete ex alcaldes, incluidos Luis Merced Garza, Pepe Manrique, José Luis Castellanos, Javier Villarreal Terán y hasta Ubaldo Guzmán Quintero.
También estaban Rafael Méndez Salas y José Benites, enlace territorial de gobierno del estado.
En el Café Mante Egidio y Pablo se sentaron a la mesa junto a todos.
Hubo un momento en donde Javier Villarreal Terán estaba lejos, a relativa distancia de todos. En ese momento fue jalado por el gobernador Egidio de sus hombros. Literalmente Egidio lo acercó a la reunión.
El acto lo vieron todos, no pasó inadvertido para nadie.
Aparentemente fue un movimiento perfectamente medido por el gobernador, quien dirigió su vista a los presentes.
Por su parte Rigoberto Rodríguez Rangel, presidente del PRI también saludó al gobernador en las instalaciones del Tecnológico. Conversó con él unos cuantos minutos.
Al gobernador se le vio buen semblante y con gran disposición a dialogar, también al presidente del PRI, quien cruzó palabras con el mandatario.
Igual ocurrió con José Reyes Guevara, director municipal de Sedesol, quien acompañó al mandatario estatal durante gran parte de su recorrido.
Al verlo, el gobernador le preguntó: ¿Cómo vas de tu salud?
El funcionario mantense le respondió: ‘Bien señor, restablecido cada vez más. Trabajando fuerte todos los días, es la consigna oficial’.
Fue felicitado por Egidio Torre por su eficaz labor en Sedesol local, y desde el templete el gobernador nunca lo perdería de vista, ni en el evento protocolario del Tecnológico ni en el recorrido.
De todos los citados, quien más tablas demostró fue Javier Villarreal Terán, quien aprovechó cada momento para saludar a gran parte de la clase política y fincar con ellos alianzas.
Muchas de estas alianzas eran tácitas, apenas signadas con fuerte apretón de manos y una mirada directa a los ojos.
Otras veces Javo se lo confirmaba con un ‘Cuenta conmigo Javier, para todo’.
Javier Villarreal por su parte aprovechó la falta de aspirantes con carisma que hay en el sexto distrito y de inmediato brincó -tras dar a conocer abiertamente su aspiración hace más de una semana- para liderar a los seis aspirantes en vigencia.
Los más fuertes aspirantes en el trending topic, los que alcanzan un puesto en las mediciones desde ciudad Victoria y el DF son, a saber, los siguientes: Javier Villarreal Terán, José Reyes Guevara Servín, Rafael Méndez Salas, Alejandro Guevara Cobos, Fanny Rodríguez y Rigoberto Rodríguez Rangel.
Javier Villarreal Incluso se trepó por encima del posicionamiento que había alcanzado Alejandro Guevara Cobos en más de 9 meses de pre campaña.
Se cree que Javier Villarreal trae el poderoso apoyo del gobierno del estado y que es él quien abandera el proyecto de empoderar a las figuras locales, no a las foráneas.
Por antonomasia Javo se ha vuelto el adalid que impediría -en el papel- el arribo del poder del centro al sexto distrito.
Aunque no va solo. Javier tiene en el alcalde del Mante Pablo González León un poderoso aliado.
Tan poderoso que hace 1 año y medio fue el alcalde que alcanzó la más alta votación registrada en Tamaulipas, y una de las más altas votaciones logradas en el país.
Bien, por ahora es todo, nos leeremos en breve.