El abuso de los vehículos oficiales.
Gilda Cavazos Literas Contralora Gubernamental.
Tamaulipas México.- El patrimonio estatal está constituido por un conjunto de bienes inmuebles, muebles, tangibles o intangibles, derechos e ingresos, tanto del dominio público como privado, que pertenece en plena propiedad a la entidad, para satisfacer las necesidades colectivas, los cuales están regulados, administrados y controlados por los poderes del estado.
Viene a cuento lo anterior por las triviales declaraciones de Gilda Cavazos Literas titular de la Contraloría Gubernamental, ya que con oficios y denuncias ciudadanas pretende frenar el abuso del parque vehicular por parte de los funcionarios del gobierno de Tamaulipas durante el periodo vacacional en lugar de implementar un programa serio para preservar el patrimonio institucional.
En el paisaje tamaulipeco cotidianamente se puede observar en las calles, estacionamientos de las tiendas de autoservicio, escuelas, centros de recreo nacionales y extranjeros, restaurantes y Molls texanos, o paseando a sus familiares dentro y fuera del horario de labores a muchos servidores públicos o parientes cercanos de estos, utilizando vehículos oficiales, consumiendo gasolina con cargo al erario público en asuntos particulares ajenos a la función pública.
Sobra decir que esta conducta trae como consecuencia un gran impacto en las finanzas estatales, por el oneroso costo del mantenimiento preventivo y correctivo, por el alto consumo de combustible, así como los seguros y el deterioro de las unidades.
De tal suerte que es una práctica tan común que empleados y funcionarios utilizar las unidades vehiculares para asuntos personales y particulares, no obstante prohibirlo el Reglamento para el Uso y Control de Vehículos Oficiales del Gobierno del Estado de Tamaulipas, esto se debe al abuso de confianza y al nulo control y vigilancia de las autoridades de la Contraloría.
Al efecto el artículo 23 dicho de ordenamiento prohíbe estrictamente a los resguardantes: Utilizar la unidad en asuntos particulares que denoten un mal uso del bien mueble; Conducir en estado inconveniente, estacionar las unidades en lugares prohibidos, exceder los límites de velocidad permitidos y en general, violar cualquier disposición del Reglamento de Tránsito en vigor
Cabe subrayar que dicho Reglamento no se respeta ni se hace respetar, debiéndose ser más estricto, después de que últimamente varios funcionarios se han visto involucrados en hechos de tránsito, en vehículos oficiales, mismos que conducían fuera del horario de trabajo, traduciéndose, es un abuso de confianza lo que está aconteciendo, por lo que tendría que remediarse siendo más exigentes.
Aquí surge la pregunta obligada ¿Así como la Contraloría vigila y controla los vehículos gubernamentales, están controlando el uso y aplicación de los recursos públicos del gobierno de Tamaulipas?
Por otro lado no sería mala idea que Gilda Cavazos Literas instrumentara e implementara un operativo que podría denominarse programa “Contraloría “Guardián”, que tenga como objetivo vigilar el buen uso de los vehículos oficiales, como una medida de preservar el patrimonio institucional y optimizar los recursos.
En el mismo orden de ideas este programa no solo tendría como propósito sancionar, sino fundamentalmente cambiar la actitud de los servidores públicos que consideran la unidad en el mejor de los casos como una prestación laboral extralegal y en el peor como una parte de su patrimonio particular.
En definitiva, con el fin de frenar el abuso vehicular propiedad del Gobierno del Estado, por parte de sus servidores públicos, se hace necesario que Gilda Cavazos Literas, promueva o gestione una iniciativa de ley para colocar dispositivos GPS satelitales en todos los vehículos para conocer recorrido diario, la ubicación exacta, cantidad de kilómetros recorridos; tiempo que la unidad ha estado estacionada y consumo de combustible de acuerdo al recorrido diario.
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