Maremágnum
Mario Vargas Suárez
Los tamaulipecos interesados en la política del estado han especulado sobre la salida de la Comisión Municipal de Agua y Alcantarillado de Victoria (COMAPA) en su calidad de gerente de un hombre que ha 17 meses de haber asumido la responsabilidad, es destituido por el Consejo de Administración.
Desde su nombramiento, José Luis Mata Blanco aceptó lo que el mismo llamó «El Reto», porque estaba enterado -a grandes rasgos- del cúmulo de problemas de todo orden que sucedían en esta dependencia municipal.
Pese a lo sabido, aceptó la responsabilidad porque tenía la confianza del apoyo tanto del presidente municipal de entonces, el CP Miguel González Salum, como el gobernador Egitio Torre Cantú.
Pese a un buen plan de trabajo, la salida del Ingeniero Mata Blanco de la COMAPA Victoria ha sido lamentada por un buen número de amigos y ciudadanos, aunque también -dicho sea con la cruda verdad- celebrada por otros, unos cuantos.
José Luis Mata Blanco desde su arribo a la COMAPA supo que había de estudiar muy detenidamente los programas que se estaban trabajando, los actuares del personal a sus órdenes.
El periodista victorense Azael Jaramillo Hernández publicó en agosto del 2012: “Sale un técnico que es el ingeniero Carlos Montelongo Terán y entra una persona que es una combinación, un “hibrido” de técnico y político…que es el ingeniero José Luis Mata Blanco”.
Las expectativas que se tenían de Mata Blanco a su arribo a la gerencia del organismo municipal eran muy claras. Azael Jaramillo desde entonces también citó: “Con la llegada de Mata Blanco no se solucionan de inmediato los problemas, pero sin duda su probada capacidad de liderazgo sacará a flote a la COMAPA. Tiene Mata Blanco la oportunidad de demostrar su valía, de lo contrario veremos cómo en pocos meses tendrá que dejar la delicada responsabilidad que hoy acaba de recibir”.
Las especulaciones sobre la salida del Ingeniero Mata Blanco, se centran en el sorpresivo aumento a la tarifa del agua desde diciembre pasado exhibidos en los recibos con el aumento sustancial, sobre todo para las familias con muy bajos recursos y este 33% es lastimoso.
Las explicaciones para el aumento del agua salieron sobrando, porque se intentó justificar con una vieja autorización del Congreso Local (2010) y que no se había hecho válida.
Desde luego que tal explicación no se justificó porque si hubo tal autorización y no se ejerció, es de suponerse que la razón es porque no hacía falta… o ¿Qué más pudo haber sido?
Por otro lado, la historia gráfica está y los medios de comunicación victorense tienen grabadas las declaraciones del Presidente Municipal de Victoria, Alejandro Ettiene Llanos, donde afirma categóricamente su defensa a los no aumentos de los servicios municipales.
En contradicción, la COMAPA Victoria plantó un horroroso y nefasto 33% y como dice el periodista Clemente Castro González en la radio: «palo dado… ni Dios lo quita», refiriendo su desconfianza por la marcha atrás de ese impopular aumento.
Lo que sigue es la incógnita por el futuro laboral del Ingeniero y Maestro en Administración Pública, José Luis Mata Blanco, porque se suma a la fría banca de la espera burocrática.
Desde Ayer, José Luis ocupa un lugar en ese espacio de espera, donde también se encuentran valores victorenses para el tricolor y para Tamaulipas, como Antonio Martínez Torres y Oscar Almaráz Smer, quien por cierto, este último tuvo la encomienda partidista de dirigir la campaña para presidente municipal de Victoria, que cierto ganó Alejandro, pero encaminó a Oscar para sentarse en la fría banca de espera.
Las especulaciones son muchas sobre este trío de victorenses -Toño, José Luis y Oscar- que tienen toda una trayectoria política y técnica en el estado y que seguro se podría aprovechar en esta última parte de la administración de Egido.
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