CENA DE NEGROS
Marco A. Vázquez
Hay tamaulipecos que usted, su vecino, y todos los mexicanos y personajes del mundo deben empezar a conocer para que sepan lo que realmente es Tamaulipas, un Estado donde, efectivamente como lo dice el gobernador Egidio Torre Cantú, lo más valioso que tiene es su gente.
Deben conocer, por ejemplo, a Balbina Pastor y Carlos Castillo Renán, que más allá de ser buenas personas son excelentes empresarios,, él ya presidente de la Coparmex en Victoria, ella toda con su vida detrás de la organización Voluntad contra el Cáncer, ambos han ayudado a cientos de personas (quizá a muchas más), a las familias completas de niños que padecen cáncer.
Si, siempre triunfan, siempre alientan, le muestran a la gente que no están solos, que hay un Dios, y los apoyan en lo posible con tratamientos, y van guiándolos para que su pesar sea menos.
Si, también aportan dinero, tiempo, esfuerzo, ideas, trabajo que sirve para mitigar el dolor de las personas, han hecho tan bien su trabajo que ese organismo cada vez se ve más completo, con más victorenses y tamaulipecos sumados a esa noble acción de ayudar al que más lo necesita y por eso se ven más fuertes, y generan mayor confianza entre la población.
Apunte en esta lista a Jorge Salinas Treviño, titular del Banco de Alimentos en Victoria que ofrece despensas a más de tres mil familias victorenses, no las regalan, las vende a 75 pesos pero si pudiera verlas notará que cada una de ellas cuesta 450 pesos por lo menos.
Al Banco de Alimentos, como institución, aportan empresas como Gran´d y muchas otras más que hacen posible la recolección de alimentos, obtener precios más baratos, y ayudar a la población que realmente lo necesita, el caso es que el trabajo del Doctor Jorge Salinas Treviño es una labor noble, altruista, que debe reconocerse y divulgarse para que más empresarios, más personas pudientes puedan aportar y sigan haciendo el bien.
Desde luego, hombres y mujeres como las que menciono aquí hay en todo Tamaulipas, en cada uno de sus municipios, desde Nuevo Laredo a Tampico de Matamoros a Tula, pasando por las ciudades de mayor población hasta el último ejido o colonia donde hay pobreza, enfermedad, injusticias.
Son, por mucho, buenos ejemplos de cómo la sociedad puede participar para seguir haciendo mejor a Tamaulipas, dirá que esa debe ser labor de las autoridades, y si en parte lo es, pero no se trata de sustituir al gobierno sino apuntalarlo en el esfuerzo que hace porque también se destinan sumas millonarias en apoyar a los que más nos necesitan.
Cito ejemplos de las buenas acciones del gobierno de Egidio Torre Cantú en materia de asistencia social, hay un programa que se llama Nutriendo Tamaulipas que ofrece despensas a bajo costo para los más pobres, se destinan miles de despensas gratuitas, también se hacen programas intensivos para detectar enfermedades crónico degenerativas como el cáncer de mama, además todos los niños que están en las escuelas y pertenecen a los municipios más pobres, o colonias de bajos recursos, tienen acceso a becas.
Es obvio que ni todo el dinero del gobierno sería suficiente para aliviar a Tamaulipas de algunos problemas que padece y ahí radica la importancia del trabajo de personajes como Balbina Pastor, Carlos Castillo Renán, Jorge Salinas Treviño.
Ojalá, si, ojalá los empresarios con mayor poder económico, que todos los días van a la iglesia a persignarse y dar gracias a Dios, se sumen en los hechos y entre todos podamos sacar adelante la Entidad, recuerde, entre más niños y jóvenes puedan ir a la escuela, a prestar servicios a la comunidad, a servirle a su colonia, municipio, Estado, menos posibilidades tendrán de andar en vicios o de caer en la delincuencia.
Falta mencionar la Cruz Roja, Caritas, y muchos otros organismos sociales que hacen labor altruista, ojalá usted los recuerde y se sume a su trabajo si los tiene cerca.
Y todo esto viene a colación porque el Banco de Alimentos declaró que algunos pudientes les subieron la canasta, ya no les ayudan a dar apoyo a los más pobres, y todo esto viene a colación para que participemos, siempre en la medida de lo posible.
En otra cosas, ayer otro penoso incidente en la historia de México ocurrió en las calles de Michoacán, allá, en aquel Estado, al Secretario de Seguridad Pública, al encargado de la Policía Federal Preventiva, y a muchas otras autoridades federales, estatales, municipales, y civiles, se les ocurrió salir vestidos de blanco y hacer una marcha por la paz, porque efectivamente, allá tienen muchos problemas con la delincuencia, parece que más que en cualquier otro lugar…
Nomás eso nos faltaba, que las autoridades rogaran en “una marcha por la paz” lo que no pueden hacer mediante estrategia, trabajo, inteligencia y operación policial, desde luego, los delincuentes están temblando, algunos al ver tan tierna acción se redimieron, y otros casi los matan de miedo… y no se ría, mejor llore.
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