El refranero, incuestionable y sabio, dicta con precisión que no se aprende en cabeza ajena, así, las épocas violentas que se vivieron en Europa y que de vez en vez se asoman con actos terroristas, las que se siguen padeciendo en los Estados Unidos aunque su gobierno insista que Alcapone se quedó en los 30´s, y también las que acabaron con un país como Colombia hasta ponerlo al servicio de la delincuencia, todos esos hechos, de poco o nada le han servido al Estado Mexicano.
La verdad es que nuestros problemas son muy a la mexicana y tal vez sería imposible encajar una de las estrategias exitosas en los casos antes mencionados para intentar salir adelante, nuestra idiosincrasia es distinta, nos negamos a ser mejores mientras los políticos se aferran en saquearnos.
Es, el ciudadano, quien no ha cumplido la tarea, no participa en los procesos electorales, después calla ante los abusos o malas estrategias del gobierno en los rubros importantes, e incluso se deja avasallar por cualquier problema hasta acostumbrarse a vivir con el mismo o morir a su lado.
Cierto, nos ha tocado padecer a políticos muy transas, que han saqueado a la nación, también a verdaderos mercenarios de la política, esos que aprovechando su condición de lideres sociales en lugar de presionar para que se corrijan los excesos lo hacen para que se engrose su cartera o su cuenta bancaria tenga más ceros.
Pero ni los que han gobernado, ni los chantajistas, ni menos los dirigentes sindicales o de grupos radicales fueran tan poderosos si el ciudadano participará, si exigiera que le cumplan las promesas que le hacen en una campaña, que se sigan al pie de la letra los programas de trabajo que se diseñan, eso, por lo menos.
A que vamos, a que tenemos un país a la altura de los ciudadanos que hemos sido, indolentes, comodinos, y hasta complacientes con la autoridad.
Increíble es que un ex gobernador como Andrés Granier vaya a la cárcel acusado de un saqueo de miles de millones de pesos, y es sorprendente porque habla de un robo sistemático del dinero, que por años los tabasqueños se dejaron morir en hospitales de mala calidad y sin medicamentos, que se conformaron con escuelas mediocres para sus hijos, e incluso que padecieron hambre porque su administración se robaba todo.
Me explico, en una sociedad normal, con ciudadanos mayores de edad, este tipo de personajes no deben existir o deben ser detectados a tiempo de tal forma que el daño que puedan causar sea mínimo.
Igual es inconcebible como se difunden videos de un alcalde del PRD recibiendo cientos de miles de pesos y siga en la grilla con la única defensa de que los otros, los de los demás partidos, son más rateros.
El caso del PAN quizá sea el más grave, no debe ser posible que se roben tanto dinero con tanto descaro, hablo por sus senadores, también por su ex gobernador en Aguascalientes, aunque el caso más peligroso, es el del diputado, coordinador de campañas en Baja California, que fue descubierto presuntamente conquistando a un jovencito de 15 años.
En Tamaulipas igual hemos padecido gobiernos indolentes, a alcaldes que saquearon a sus municipios y nada ha pasado, al contrario, hoy se dan el lujo de andar en la calle pidiendo el voto a favor del Movimiento Ciudadano, del PAN, del PRI, y hasta del PRD y a veces hasta con una sonrisa y fingiendo alegría le llegan a caer bien a la gente.
A eso vamos, a que aprovechemos que estamos en campañas políticas, a que aprovechemos que casi todos los partidos y casi todos los candidatos y candidatas se han mostrado trabajadores y andan en la calle pidiendo su confianza.
¿Cómo?, bastante sencillo, vigílelos, vea quien es de confianza, pídale una explicación de cómo pretende solucionar los problemas que padecemos y transparentar el uso de los recursos, después, si lo convence, acompáñelo a pedir el voto, y ahí no termina el trabajo, el siguiente paso es vigilar su forma de gobernar, detectar a tiempo cualquier intento de saqueo por parte del que gane o de sus colaboradores, así, realmente así, podrá trabajar usted también a favor de sus hijos.
Tamaulipas esta de fiesta, hasta hoy, aunque muchos no sean santos de mi devoción, hay que reconocer que en materia electoral llevamos un 10, mucha participación, mucho trabajo para convencer al electorado.
Aplausos y ponernos en acción todos porque ahora Tamaulipas nos necesita, a los ciudadanos, nos invita a crecer y adquirir la mayoría de edad para evitar que los problemas que ahora padecemos crezcan, igualmente para encontrar entre los candidatos las mejores propuestas, a los más decentes, a los que no traicionan.
Con la participación de todos verá que las cosas salen bien, tal vez no tendremos un final de telenovela pero si podremos hacer que nuestro futuro sea feliz, llevadero, y con amplias posibilidades de que nuestros hijos lo disfruten más.
Viva Tamaulipas altiva y heroica, la región que dormita, a la margen del río, la sangre palpita en el pecho mío… al recuerdo glorioso de sus héroes y su honor.
