CENA DE NEGROS
Marco A. Vázquez
El utilizar dinero publico para obtener votos a favor de un partido político es aberrante, sobre todo cuando eran recursos para la salud, la educación, la obra pública, pero hay cosas peores, como cuando se refiere a fondos para combatir la pobreza que se utilizan para obtener sufragios, ahí la acción pasa de ser un abuso, o una aberración, a no tener madre por parte de quien lo haga.
Se estilo mucho en el PRI que duró 70 años en el gobierno, eran las épocas en las que la fiscalización era un sueño, no existía una sociedad fuerte, menos partidos políticos que hicieran contrapeso a los tricolores y se daban gusto usando el dinero a placer y sin mediar leyes de por medio.
Llegaron las épocas de la pluralidad, la gente se harto a nivel local de muchos gobiernos tricolores y estos pasaron a manos del PAN, del PRD, de otros partiditos que incluso ya desaparecieron, y, para lamento de todos, hicieron exactamente lo mismo, también descubrieron que la pobreza, cuando se sabe manejar, parece una fabrica de votos que les ayudaba a permanecer en el poder.
Se vino el gobierno federal del PAN, ese de Vicente Fox y Felipe Calderón, e hicieron lo mismo y cosas peores, porque también se robaron el dinero de los más pobres pero además aderezaron la situación con políticas de quitar subsidios que iban en contra de los mismos, es por eso que dejaron a la mitad de la población en la pobreza extrema, le hablo de 52 millones de mexicanos que no tienen ni para comer tres veces al día.
Hoy, el uso del dinero destinado a combatir la pobreza, otra vez se esta cuestionando, en Veracruz, por ejemplo, la Secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga, tuvo que despedir a su delegado, se presume, porque hizo mal uso del dinero, que lo ocupó para buscar votos a favor del PRI.
Desde luego, es buena la acción de Rosario Robles, excelente decisión la de despedir a personajes que le hacen daño a este país, que se fijan primero en los colores y luego en su obligación de servir a México.
Después el presidente Enrique Peña Nieto habló sobre el caso, le dio todo su respaldo a Rosario, le dijo que confiaba en ella, en su trabajo, y en su compromiso de buscar lo mejor para los mexicanos, (para después recordarnos a todos a Felipe Calderón) fue breve, pero suficiente cuando dijo que todo el escándalo era obra de partidos políticos que buscan los votos, que piensan en elecciones y no en México.
Todo parece bien hasta ahí, el problema es que no basta que se haya despedido a un personaje, o dos, o a seis, sino que se les meta a la cárcel para que sean un vivo ejemplo de que no se volverá a permitir que se roben el dinero de los más pobres.
Más aún, es obvio que se deben buscar formas de blindar el dinero público de tal manera que no se vuelva a convertir en botín de vivales, en un tesoro del cual solo fluyen migajas para los más necesitados y los funcionarios de alto nivel se siguen quedando con todo, o casi todo, porque compran el voto muy barato, lo hacen en seis meses mientras que administran todo el país durante seis años.
Si, tiene razón, fue bueno el discurso de Enrique Peña Nieto cuando dice que se debe pensar en México y no en elecciones, pero, por el bien de México, no debe caer en la tentación de hacer proselitismo a favor de su partido, tiene que tener presente que es el gobernante de todos los mexicanos y ya no recordarnos más a Felipe Calderón o peor aún, a Fox.
Igual tiene razón, lo que hizo Rosario Robles fue correcto, hay que despedir y mandar al diablo a los que usan mal el dinero destinado a los más pobres…
EL problema es que no pasa nada, no dan señales de que habrá decencia en el manejo del dinero, en que no volverán a utilizarse los recursos destinados a los más pobres como una forma de buscar votos, si, parece que si, que todavía siguen con las mismas prácticas y por lo tanto le debemos decir… tú también Chayo.
Para ser más claros, bien vale recordar las palabras que ofreció en su visita a Tamaulipas José Encarnación Alfaro, Secretario de Elecciones del Comité Ejecutivo Nacional, el CEN, del PRI.
“Los gobernadores o el presidente de la república (habrá que agregarle a todos los secretarios y funcionarios de todos los niveles, y hasta la burocracia) son militantes como nosotros, les reconocemos un liderazgo político muy importante pero, no centramos ni ciframos, ni descansamos la expectativa del triunfo en la actuación de sus gobiernos, porque sus gobiernos son para todos los mexicanos”.
A propósito, en algo poco común todos los representantes de los organismos públicos y privados están haciendo equipo con Alejandro Etienne Llano, la presidenta de la Canaco fue primero, luego la Coparmex, y ahora le toco el turno al presidente de la Cámara de la Industria de la Construcción, Jorge Velazquez quien afirmó que la trayectoria del candidato del PRI a la alcaldía de Victoria es suficiente respaldo para confiar en él.
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