Tiempo de opinar
Raúl Hernández Moreno
Marzo 29
A menos de 53 horas de que concluya el plazo para el registro de candidatos a la presidencia municipal, en Nuevo Laredo no se ha registrado uno solo y eso que habremos de tener 10 prospectos, siete postulados por partidos y tres independientes.
Este día, Ramón Cantú Deándar se presentó ante el Comité Municipal Electoral que preside José Antonio Villa Medina, en una visita de cortesía, pues su registro debe hacerlo ante el Consejo General del IETM, en Ciudad Victoria, como efectivamente lo hará mañana miércoles.
No deja de ser un ejercicio abusivo del poder que el Congreso y el IETAM hayan decidido que los independientes tengan que hacer todos sus trámites y registros en la capital del Estado y no en los municipios por los que compiten. Cada visita a Victoria implica un gasto en dinero y esfuerzo para los independientes. Todo es con el fin de ponerles obstáculos, trabas, encarecerles su participación, disuadirlos, desmotivarlos.
Con todo y eso, Héctor “Teto” Peña dijo que este miércoles se registrara en Victoria y lo hará con singular alegría, convencido de que con el apoyo ciudadano derrotará a los partidos y a una ley antidemocrática aprobada precisamente por los partidos, empeñados en no perder sus privilegios.
Es probable que la tarde de este miércoles se registren tanto Héctor Canales como Enrique Rivas, lo que permitirá conocer la planilla del PRI que en esta ocasión se ha manejado con mucha secrecía y los únicos seguros con Raquel Guajardo del PANAL y Rafael Tawill y Gustavo Pantoja, propuestos por el Verde, partidos aliados del tricolor, el único que logró una mega alianza en Tamaulipas y eso que no la cacareó.
En otro tema, Andrés Manuel López Obrador, a su llegada este día a Reynosa, donde presentó su más reciente libro sobre Catarino Garza, tamaulipeco de la época de la Revolución, dijo que “Tamaulipas ya está preparado para la alternancia, pero no hacia la derecha”.
Y lapidario se les fue a la yugular a los dos candidatos más fuertes: “Son iguales, Hinojosa del PRI y Cabeza de Vaca del PAN. Los dos son delincuentes de cuello blanco”.
Semanas atrás también arremetió contra los independientes, de quiénes dijo que son comparsas de otros partidos.
En síntesis: para AMLO está bien lo que él decide, está mal lo que él condena. Cual ser omnipotente, tiene poder para condenar y perdonar. A uno al que perdonó y subió a un pedestal, es a Manuel Bartlett. Basto que él lo perdonara, para que todos olvidaran el año de 1988 y la caída del sistema.
En fin, allá López Obrador y sus fans, de los que tiene muchos, aunque no, afortunadamente, como para ganar la presidencia de la república.
La izquierda, y no solo Morena, debe voltear la vista hacía nuevos actores, como Ricardo Monreal, pero su crecimiento dependerá de que López Obrador lo deje crecer y no le vemos voluntad.
Y es una lástima, lo decimos en serio, porque toda nación democrática necesita de una izquierda inteligente, combativa, consistente, que sirva no de comparsa al partido en el poder, sino de contrapeso.
