Por Oscar Díaz Salazar
Más de dos meses lleva cerrado un tramo del bulevar Las Fuentes de Reynosa, entre los bulevares del Maestro e Hidalgo, porque (No) se llevan a cabo las obras de reposición de tubería de drenaje.
La demora, la suspensión, la tardanza, el olvido, la omisión, el descuido y el abandono, todo eso es lo que distingue a la actual administración de la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Reynosa (COMAPA).
El ejemplo es solo uno de muchos, uno actual, que pueden validar los miles de reynosenses que transitamos cotidianamente por ese rumbo y que puede usted visitar en este día, para constatar el desorden que ocasionan, pues no se han tomado la molestia de identificar la obra, de anunciar la interrupción del tráfico, de colocar señales de alerta vial, ni de trazar la vía alterna para quienes pretendían usar esa ruta.
Lo que ocurre en esas tres o cuatro cuadras del bulevar Las Fuentes, es el reflejo de la anarquía y de la mala conducción que hoy tiene la COMAPA de Reynosa. Las calles de la ciudad, que históricamente presentan daños mayúsculos y falta de pavimento, son maltratadas (rotas) por las cuadrillas y las constructoras al servicio de la COMAPA, y permanecen abiertas y expuestas a la humedad y a daños mayores, por mucho tiempo, por meses en las que no se le abona ni un mínimo talachazo para la conclusión de los trabajos.
El trabajo sustantivo de la empresa, que es dotar de los servicios de agua y drenaje a los reynosenses, no es prioritario en la COMAPA de Reynosa. Lo que vale e impera en la COMAPA es el lucro, los «bisnes», los contratos, el saqueo, las transas, la política, la lucha por los espacios, la compra de lealtades políticas, el reparto del botín entre actores políticos, la disputa por la nómina, el reclutamiento de activistas políticos, el lucimiento personal y político.
Desde afuera, el secretario del Agua del gobierno de Tamaulipas, Raúl Acuaman Quiroga, utiliza los servicios del diputado Ovidio García, para proponer reformas legales que le permitan meterle mano al botín de las COMAPAs, incluyendo por supuesto la de Reynosa. Reformas inútiles que no toman en cuenta que ya el gobierno del Estado tiene tres representantes en el Consejo de Administración, que deberían tener acceso a toda la información que hoy demanda el Acuaman Quiroga.
Es obvio que el actual gerente, Alfonso Gómez Monroy, no cumplía con el requisito de tener estudios técnicos de ingeniería o arquitectura, ni experiencia en los temas hidráulico, a menos que pretenda pasar como expertise en el área, la compra de garrafones para sus comedores industriales y la preparación de aguas de limón.
