El diputado local Vital Román, de morena y representante de un distrito con cabecera en Ciudad Victoria.
Votó en contra del matrimonio igualitario.
Votó en contra de su fracción parlamentaria.
Votó en contra de la plataforma legislativa que registró la coalición de la que fue candidato.
Votó en contra de lo que establecen los documentos básicos de su partido.
Votó en contra de lo que las expresiones progresistas identifican como libertades individuales.
Votó en contra de las obligaciones y derechos de la democracia representativa.
Votó en contra de colectivos, individuos y parejas que reclaman el derecho a decidir libremente con quien «emparejarse».
Votó en contra por sus convicciones y prejuicios.
Votó en contra en el pleno legislativo.
Votó en contra en sus redes sociales
Utilizó como pretexto la propuesta de consultar a sus electores para tomar estas decisiones «importantes». Si este argumento no fuera un mero pretexto, una justificación, su voto debió ser por la abstención, pues con su voto en contra supone que así lo deseaban sus electores, que no fueron consultados.
Sería prudente que el diputado Vital Tamez nos dijera en que otros temas no está de acuerdo con su partido y con su fracción parlamentaria. Que nos advirtiera los temas en los que piensa como los conservadores y en los que considera votar con los panistas.
