Primero mis dientes
PASADO MERIDIANO
GRICELDA GUERRA ROMERO
Tal parece que, para la dirigencia nacional del PAN el ex gobernador Francisco Garcia Cabeza de Vaca ya no es un activo que les interese tanto. Luego de que lo dejaran fuera de la lista de nacional al Senado de la República, por la vía de Representación proporcional, para sorpresa de sus allegados en Tamaulipas.
Aun cuando mucho aseguraban que lo estarían blindando utilizando esta vía, pues al parecer al dirigente Marko Cortes aplicó aquello de “primero mis dientes y luego mis parientes”. Así que sus cuates se ubicaron en las cinco primeras posiciones.
Y es que, dadas las condiciones, a como se están empezando a ver las cosas, pues el dirigente panista no se quiso arriesgar, cediendo esta posición al ex mandatario, que en lugar de sumar les significaría restar simpatías.
Y es que fuera de Tamaulipas, Cabeza de Vaca ya no es esa figura que significara fuerza y presencia; ahora es reducido a un prófugo escondido en el extranjero, que no se atreve a sacar la cabeza ante el temor de que se la corten. Es por ello que el cabezón y compañía se aferran, con uñas y dientes, a las pocas posiciones que podrían pelear y que no permitirán que panistas, que no son afines a sus intereses, les puedan quitar alguna.
Precisamente uno de esos incondicionales de Cabeza de Vaca, el diputado y dirigente estatal del PAN, Luis Cachorro Cantú pidió licencia a la legislatura del Congreso del Estado por tiempo indefinido, para buscar la alcaldía de Reynosa.
La solicitud de licencia del Cachorro Cantú fue aprobada por la Comisión Permanente del Poder Legislativo, por lo que inmediatamente el panista se separó de su cargo para enfocarse en tratar de arrebatarle la presidencia a Makito.
Con esta no sería la primera ocasión que El Cachorro Cantú pide licencia al congreso, pero ante la poca posibilidad de éxito, no se duda que este de regreso.
Por otro lado, causó sorpresa la salida de Morena de Edna Rivera, quien más ni más pues decidió brincar al partido Movimiento Ciudadano, esto al considerar que el partido guinda ha dejado de ser democrático y de esperanza para el pueblo, al alejarse de los principios fundamentales que los distinguieron, perdiéndose el rumbo en los compromisos con la ciudadanía.