En Reynosa, las crecientes fugas de drenaje sanitario y agua potable están ejerciendo una presión significativa sobre la ciudad. Las fugas parecen multiplicarse en diferentes sectores de la ciudad, lo que ha llevado a un clima general de descontento entre las familias afectadas por esta problemática.
En la intersección de las calles G. de la Cruz y Estefanía Castañeda, en la colonia Ribereña, han surgido dos brotes de agua limpia que llevan más de tres semanas activos. Estas fugas han causado agrietamientos en el pavimento y han dado lugar a la pérdida de agua que fluye a través de toda una cuadra antes de terminar en un drenaje pluvial ubicado en el bulevar Fundadores.
Los residentes, como María Fernández, han instado a la Comapa (Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado) a tomar medidas para reparar las tuberías dañadas y evitar un desperdicio continuo de agua antes de que la situación empeore.
En otro sector de la ciudad, específicamente en la calle 20 de Noviembre con División del Norte, en la colonia Aquiles Serdán, se ha producido otra fuga de tipo residual que ha provocado una gran charca. Los vecinos de la zona, como Marilú Guzmán Estrada, expresan su preocupación por las posibles consecuencias sanitarias y solicitan a las autoridades de la Comapa que aborden la situación. Además, señalan que los olores desagradables afectan a quienes acuden al Centro de Rehabilitación Integral (CRI) y a quienes trabajan allí.
Estos casos de fugas de agua subrayan la necesidad de una acción inmediata y eficaz por parte de las autoridades para abordar este creciente problema de infraestructura en Reynosa y garantizar el suministro de agua potable y el saneamiento adecuado para sus residentes.
Fuente: El Mañana de Reynosa
