Fuentes fidedignas. Por: Isaias Alvarez
De nada le servirá a los panistas de Tamaulipas haber esperado tres años para buscar una oportunidad en las elecciones de 2024; sentirán que observan la misma película de 2021, con los mismos actores, el mismo guión y el mismo desdichado director. El título del melodrama no puede ser otro que “Crónica de una derrota anunciada”, como lo perfilan las encuestas conocidas.
El responsable de esta desgracia es Francisco García Cabeza de Vaca, designado insólitamente como coordinador de la mesa de Seguridad del Frente Amplio por México. Este nombramiento, para muchos militantes, es una señal de despedida como posibles candidatos en las próximas elecciones.
Ha quedado de manifiesto que el Partido Acción Nacional le pertenece a Marko Cortés y a Cabeza de vaca o, por lo menos, lo controlan. De nada le ha servido a varias figuras tener prestigio, capacidad, experiencia, cuando su organización prefiere a un prófugo de la ley como su mayor representante.
De ese tamaño es el compromiso del partido conservador con el ex mandatario, a quien protege por encima de todas las cosas, aunque eso signifique sacrificar la misma alianza y sus posibilidades de ganar la presidencia. Con sorpresa se discute cuál es la razón de este apego, y ya hubo quien mencionara a “poderoso caballero, don Dinero”.
Marko sigue actuando como empleado de Cabeza de Vaca, al que infla con argumentos tan grotescos como falsos. Llamar experto en seguridad al reynosense no resiste el análisis serio. En Tamaulipas, solo hay otra persona que lo considera así, y es René “Cachorro” Cantú, otro empleado del mismo personaje.
De este modo, la preocupación más importante del PAN, a través de la decisión de su dirigente, no es preparar cuadros competitivos ni un proceso interno ejemplar para la elección de 2024, sino defender a un solo hombre de sus innumerables problemas judiciales.
Se nota que Cabeza de Vaca dejó bien aceitada la maquinaria para manipular al PAN cuando lo creyera necesario, como ocurre justo ahora. El pasado 3 de mayo, en su escondite de Texas, hizo que lo acompañaran Ricardo Anaya y Marko Cortés durante una reunión con profesores conservadores de Estados Unidos. La imagen de dicha reunión no le servía a Marko, a Anaya ni al PAN, pero sí a Cabeza de Vaca, quien carece del suficiente blindaje para entrar a México sin ser detenido.
Para el ex mandatario, precisamente, la apariencia, la percepción, más que la realidad, lo es todo. Por eso está volcado ya en su papel de experto del Frente y acaba de publicar un Twitt para exaltar a los aspirantes panistas: “Felicito a @XochitlGalvez, @BeatrizParedes Y a @SantiagoCreelM, por plantear durante segundo foro del Frente Amplio por México, la importancia del cambio en políticas públicas de seguridad en México. Con voluntad política, firmeza y convicción se podrá lograr el cambio que nuestro país y su gente merecen”. Rollazo.
Que nadie se extrañe si Marko Cortés le prepara un enlace en vivo a Cabeza de Vaca desde Estados Unidos, en pantalla gigante, para que robe escena en el segundo foro. De hecho, esa es la finalidad del nuevo ejercicio, no la seguridad ni el cambio de políticas públicas.
El plan último de Francisco es mover a su antojo el tablero del panismo tamaulipeco en las próximas elecciones. Su lista de candidatos ya está hecha y nada podrán exigir las bases ni las figuras estatales para ser incluidas, por más que sobresalgan o sean aprobados por la sociedad.
Se quedan con las plurinominales sus fieles seguidores: Ismael García, su hermano; Imelda Sanmiguel, César Verástegui y Gerardo Peña, es decir, los mismos de siempre. Del Truko puede decirse que posee un liderazgo real en la entidad, a pesar de haber perdido la gubernatura, pero los otros carecen por completo de visión, de propuesta y de compromiso con la democracia, como no sea cumplir con los dictados del reynosense.
Incluso alguien tan negado y vulnerable como Luis Cantú Galván, el Cachorro, está contemplado como candidato a la alcaldía de Reynosa por el PAN. Estamos de acuerdo en que los ciudadanos de este municipio están necesitados de un cambio urgente, quizás hasta de partido, pero no al grado de poner al Cachorro.
El panismo tamaulipeco tiene otro líder que ha hecho historia en Tampico, Chucho Nader, a quien muchos apoyaban para la gubernatura. Ojalá que Acción Nacional tenga un lapso de lucidez y aproveche el impulso que le puede dar el alcalde tampiqueño al partido, pero ya no depende de él, lamentablemente. Por otro lado, el diputado Mon Marón también es un miembro respetado en la 65 Legislatura y podría serle útil al PAN. Sin embargo, tampoco está en sus manos que obtenga una posición.
Son las manos de Cabeza de Vaca las que manejan la lista de candidatos de 2024, por lo menos los de los primeros lugares. Todo puede cambiar de aquí a diciembre, incluso a marzo, pero es impredecible. Lo que ya es un hecho es que el PAN se está fosilizando con los mismos candidatos de siempre.
