Washington, EU/Redacción:
No cabe duda que el karma se encarga de poner todo en su lugar y qué mejor ejemplo que con lo que le pasó recientemente a Simon Leviev, mejor conocido como “El estafador de Tinder”.
Dicho sujeto, que en realidad se llama Shimon Hayut, obtuvo fama tras presentarse en Netflix un documental en el que se revelaba la forma en que engañaba a decenas de mujeres en la red social Tinder.
En su perfil, Shimon, quien se hacía llamar falsamente como Simon Leviev, se mostraba al mundo como un “ricachón” con una vida llena de lujos, sin embargo, todo era obtenido de manera ruin robándoles dinero a sus víctimas por medio de engaños.
Todo comenzaba con los “match” en la app de citas, en donde intercambiaban mensajes y él programaba encuentros en donde no sólo las seducía, sino que les hacía creer un falso amor.
Luego de ganarse su confianza y tras haberlas convencido de que era “millonario”, salió con que lo perseguían y que escapaba de “enemigos”, por lo que fingía necesitar dinero para huir, con la promesa de que se los regresaría, sin embargo, eso jamás ocurrió.
Pero tarde o temprano el destino se encarga de poner todo en su lugar, y con Shimon Hayut no fue la excepción, pues al querer verificar su cuenta de Instagram y de su actual pareja, Kate Konlin, resultó engañado.
La cucharada de su propio chocolate se la llevó cuando de manera privada fue contactado por una mujer identificada en Instagram como Richanna, quien le explicó que trabajaba en Meta, compañía que dirige Mark Zuckerberg, dueño de Facebook, Instagram, Twitter y Whatsapp.
Ella le dijo que podría ayudarlo a verificar su perfil y eliminar las cuentas falsas creadas por personas que se hacían pasar por él en Instagram.
Sin embargo, Shimon dudaba de la veracidad de Richanna, por lo que pidió tener una videollamada con el presunto trabajador de Meta, que se hizo llamar Chris Fox.
Este sujeto montó un fondo que simulaba las oficinas de la empresa y que todo era tan real, al grado que Leviev cayó en la trampa.
Para dicho cometido, la pareja le pidió a Shimon 6 mil euros, lo que equivale a cerca de 137 mil pesos mexicanos, a fin de realizar la verificación, lo cual fue pagado en dos exhibiciones.
No obstante, el tiempo comenzó a pasar y nada más nunca apareció la famosa palomita azul que distingue a las cuentas verificadas, por lo que de nuevo se comunicó a las oficinas de Meta, donde le confirmaron que no se cobra por otorgar la insignia, por lo que, en efecto, Simon Leviev resultó estafado.
Finalmente, de forma afortunada el gigante tecnológico accedió a verificar tanto su cuenta como la de su novia, puesto que ahora cuando se les busca, su perfil aparece con la palomita azul.
