No cabe duda que la salida del PRI del doctor Felipe Garza Narváez levantó ámpula, me dicen que en la redes sociales le fue muy mal, bueno, hasta una corona de flores le enviaron “Gracias Felipe, Atte. Priistas de corazón” según reza la banda que la enmarca.
El pasado miércoles a través de varios medios donde un servidor colabora, di a conocer una entrevista de Viviano Vázquez Macías, dirigente del PRI en Nuevo Laredo, en ella me dice que a final de cuentas Garza Narváez enseño el cobre, pues abandona el partido al no ver futuro promisorio para su persona, como lo hubo para él en tanto años que gobernó el tricolor en Tamaulipas.
“Se va un priista que no tiene lealtad a su partido porque se sirvió de él y hoy que ve que no hay algún puesto donde pueda ganar, mejor se va el señor”, señaló Vázquez Macías.
A raíz de esa entrevista, al siguiente día mientras andaba en la cobertura del Congreso Regional para Competitividad en el Centro Cultural, se acercó a mí un personaje que se ostentó como amigo muy personal de Felipe Garza, pues según han andado juntos no solo en trabajo partidista, sino hasta en la tertulia, en la fiesta, por lo que me pidió no revelar su nombre.
Este personaje me platicó el verdadero motivo de la renuncia del Garza Narváez y le echa la culpa al ex gobernador Egidio Torre Cantú, pues asegura que sigue metiendo las manos en el partido y no permite que alguien que en verdad quiera ayudar, actúe.
“A penas y asomas la cabeza con la intención de organizar algo que ayude a sacar del bache en el que ha caído el PRI y se te echan todos encima”
“Date una vuelta por las oficinas del PRI en Victoria y parece una casa abandonada como embrujada”
“Eso sí, Aida Zulema (dirigente estatal del tricolor) cobrando su chequezote”
Fueron algunos de los argumentos que me dio esta persona. Lo cierto es que para el priismo tamaulipeco no se ve una luz que vislumbre buenos tiempos, no se percibe ese buen samaritano, y los que andaban bien “enjundiosos” de repente se apagaron.
QUE EGIDIO IMPONDRÁ DIRIGENTES
Será cierto entonces que esa pasividad tricolor tenga que ver con el rumor que traen desde algunos días en la capital cueruda de que Egidio Torre meterá mano en cuanto a la designación no solo del dirigente estatal del partido, sino hasta de los municipios más importantes del estado políticamente hablando y en ellos va incluido Nuevo Laredo.
“No pues si así, hasta yo me salgo del partido”, me dijo el personaje arriba mencionado
Habrá que señalar que a la actual presidenta del partido Aida Zulema Flores Peña, se le acusó de permitir que gente de Torre Cantú, incluyendo a dicho ex gobernador de triste memoria, quedaran incrustados como consejeros nacionales del PRI, el mensaje fue claro en ese entonces, -Torre Cantú seguirá llevando las riendas del partido-, no por algo va en la primera posición de los Consejeros por Tamaulipas.
Hay que recordar que por noviembre de hace un año, se manejaba ya la llegada de Manuel Muñoz Cano y el posible reposicionamiento de otro ex gobernador, Eugenio Hernández Flores, pero al darse a conocer la lista de los nuevos consejeros, como dicen en el argot beisbolero “Pa’ tras los fielders”.
Lo malo para los priistas es que más de uno acusa a Egidio como el principal operado de la derrota del PRI en Tamaulipas y por ende, el principal traidor.
PRIISTAS APOYARÍAN A FRANCISCO CHAVIRA
De ser cierta esta maniobra de ETC, no duden que muchos priistas simpatizaran entonces con la acción judicial que emprendió Francisco Chavira Martínez contra Egidio Torre Cantú.
El ex candidato a gobernador por la vía independiente demandó al inquilino de San Pedro Garza García en la Subdelegación de la Procuraduría General de la Republica a principios de la semana pasada.
De acuerdo a medios estatales y nacionales en la querella que presentó Chavira Martínez acusa a Torre Cantó de proporcionar protección a Tomás Yarrington Ruvalcaba al dotarlo de escoltas pagados por el erario.
Además de los siguientes cargos: presunto ejercicio indebido de servicio público, uso indebido de atribuciones y facultades, asociación delictuosa, abuso de autoridad, ejercicio abusivo de funciones, tráfico de influencias, cohecho, delitos cometidos por servidores públicos y lo que resulte.
Algunos piensan que no pasará nada con dicha demanda, pero a como se han venido dando las cosas últimamente, no dudemos que se le dé curso. En los últimos 2 años han caído 5 ex gobernadores acusados de corruptos; Andrés Granier de Tabasco, Guillermo Padrés de Sonora, Luis Armando Reynosa de Aguascalientes, Tomás Yarrington de Tamaulipas y Javier Duarte de Veracruz.
De tal manera que tal vez más de un priista en el estado, este cruzando los dedos para que dicha demanda proceda.
