La senadora Olga Sosa denuncia trato inhumano a migrantes y solicita eliminar impuesto a remesas

Río Bravo, Tamaulipas — Desde el norte de México, la senadora morenista Olga Sosa alzó la voz contra el trato que reciben los migrantes mexicanos en Estados Unidos. Lo hizo durante una gira por escuelas fronterizas, mientras en California se multiplican las denuncias por redadas masivas que han puesto en riesgo a comunidades enteras de trabajadores indocumentados.
“Estamos totalmente en contra del trato inhumano que se le ha dado a nuestros hermanos y hermanas migrantes”, declaró Sosa, quien representa a Tamaulipas en el Senado. Habló con el gesto serio, consciente de que muchos de esos migrantes son paisanos suyos: hombres y mujeres que cruzaron la frontera para trabajar en el campo, en la construcción, en lo que haya.
La legisladora respaldó el papel de las embajadas mexicanas en la atención a los connacionales detenidos o perseguidos, e insistió en la necesidad de garantizar su derecho a la defensa legal. “No se puede permitir que criminalicen a gente trabajadora”, dijo.
Pero Sosa no solo denunció el acoso migratorio. También cuestionó el impuesto que México impone a las remesas: un porcentaje que, aunque ya fue reducido al 3.5%, sigue afectando a miles de familias. “Es un impuesto injusto, violatorio y discriminatorio”, afirmó.
Cada mes, según explicó, las familias en Tamaulipas reciben alrededor de ocho mil pesos enviados por sus familiares en Estados Unidos. Reducir ese ingreso por medio de un cobro estatal, dijo, es un golpe directo al esfuerzo de quienes sostienen la economía desde lejos.
Desde su curul en el Senado, Sosa se suma a una corriente legislativa que busca revertir el impuesto por completo. “Debe regresar a cero, como estaba, como es lo legal”, sostuvo.