Las perspectivas sobre la evolución económica de Estados Unidos ayudarán a México a impulsar el desempeño de la actividad productiva y dependiendo de la respuesta que las autoridades tengan a las presiones externas, los constantes ajustes a la baja sobre los estimados de crecimiento podrían comenzar a revertirse, advirtió el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).

Los pronósticos de crecimiento para Estados Unidos han mejorado a un avance estimado del PIB de 2.3 por ciento para el 2018 desde 1.6 por ciento en 2016 y dada la elevada integración que existe con el sector productivo estadounidense, “Un mayor dinamismo de nuestro principal socio comercial significaría un impulso para la actividad económica mexicana, lo que tendría que reflejarse en una mejor perspectiva para el corto y mediano plazo”, señala en su informe semanal.

La respuesta que las autoridades tengan a las presiones provenientes del exterior será determinante para que las correcciones a la baja en los pronósticos de crecimiento se reduzcan o incluso puedan comenzar a revertirse en los próximos meses.