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Ramón Garza Barrios demanda a Carlos Canturosas

Raúl Hernández Moreno

Nuevo Laredo,- En un hecho sin precedentes, el ex alcalde Ramón Garza Barrios demandó penalmente, ante el Ministerio Público del Estado, al alcalde Carlos Canturosas, a quien acusa de hacer uso indebido de funciones y de distorsionar la realidad, al exhibirlo ante la opinión pública como responsable de desvío de recursos en la ejecución del drenaje pluvial Campeche.

Es la primera de varias denuncias en contra de Canturosas. En las próximas horas hará lo propio el agente aduanal César Valdez, una de 10 personas contra las cuales el Ayuntamiento de Nuevo Laredo presentó una denuncia de hechos ante la Procuraduría de Justicia de Tamaulipas, por el presunto desvío de recursos del citado colector.

Uno de los denunciados es el abogado Carlos Hugo Hernández Madrigal, quien falleció hace algunos meses y formaba parte de la plantilla de personal del Municipio.

Garza Barrios demanda también al síndico segundo, Jorge González Fisher, que fue quien presentó la denuncia de hechos en su contra.

Se queja de que la demanda en su contra es por razones político-electorales y que en el caso del alcalde Carlos Canturosas hizo uso indebido de funciones, pues antes de demandar debió obtener la autorización del cabildo y no lo hizo.

Están distorsionando la realidad sucedida con el único propósito de obtener un beneficio político para el Partido Acción Nacional.
“A Fisher lo demando porque no es posible que en estos momentos, no sean conocedores de la ley, y lo hagan en época electoral, y ya cuando ya se van. Cinco años después de que salí yo como presidente municipal, (y por) abuso de autoridad por parte de Carlos Canturosas”, declaró.
La demanda de Garza Barrios, ex diputado local 2005-2007 y ex presidente municipal, 2008-2010, es la respuesta a la denuncia de hechos que el Municipio, a través del síndico segundo, Jorge González Fisher, presentó ante la Procuraduría el 1 de abril en contra de 10 ex funcionarios que habrían tenido responsabilidad en las obras inconclusas del colector Campeche.

La denuncia se conoció el 19 de abril, un día después del arranque de las campañas electorales, lo que de acuerdo al candidato del PRI a la presidencia municipal, Héctor Canales González, se trata de un asunto político.

ANTECEDENTES

En el 2008 el Banco para el Desarrollo de Norteamérica le facilitó al gobierno de Nuevo Laredo un crédito por 242 millones de pesos, para utilizarse en la construcción de un proyecto integral de colectores pluviales que contempló 33 mil 683.40 metros lineales, de los cuales se terminaron 18 mil 925.30 metros, equivalentes al 56.19 por ciento.

El proyecto integral incluyó a los colectores Riva Palacio, Campeche, Independencia, Paseo Colón, 15 de Septiembre norte, 15 de Septiembre sur y Concordia.

La inversión total de esos 33 mil metros lineales, se estimó en el 2008 en 643 millones, de los que se aplicaron 401 millones, 242 del crédito del NadBank y 159 de aportaciones municipales y estatales, revela el ex alcalde Ramón Garza Barrios.

De los 242 millones que prestó el NadBank, 152 millones 925 mil 291 millones de ejercieron en el colector Campeche y 89 millones 037 mil 592 en el Independencia.

Con los 33 mil metros de tubería se pretende acabar con las inundaciones. La instalación de los primeros 19 mil metros, ha permitido acabar con encharcamientos en zonas alrededor de la presidencia municipal, en Madero y Allende, en Madero y Guerrero, frente a la agencia de la cervecería Cuauhtémoc, por la avenida Obregón, en la calle Campeche, entre otros muchos sectores.

Desde el inicio de la actual administración, tanto el alcalde Canturosas como su Secretario de Obras Públicas, Carlos de Anda –actual candidato a diputado local—han hecho declaraciones a la prensa, asegurando que hubo irregularidades en la construcción del colector Campeche y que no se invirtieron los 242 millones de pesos del crédito del NadBank.

Su argumento es que siguen dándose encharcamientos.

Sus reiterados señalamientos, provocaron la intervención del director del NadBank, Gerónimo Fernández, quien vino a Nuevo Laredo el año pasado y a solicitud del gobierno municipal, autorizó la contratación de una empresa privada para auditar el Colector Campeche y aclarar dudas.

La auditoría costó más de tres millones de pesos, que absorbió el NadBank.

El 25 de octubre de 2015, en la sala de cabildo del Ayuntamiento, el consultor Luis Eduardo de Ávila Rueda, de la empresa Consultores Mexicanos, rindió los resultados de la auditoría y exoneró, literalmente, de culpa y responsabilidad a Ramón Garza Barrios.

Dijo que, hubo fallas en la ejecución del proyecto por parte de la empresa Micro Túneles, una de las cuatro empresas a las que se contrato para hacer la obra.

También reveló que los costos se les dispararon a las empresas porque el suelo estaba rocoso y dificultó la perforación.
Precisó que la administración de Garza Barrios fue quien llevó a cabo la contratación de las obras de construcción de los colectores Independencia y Campeche, a excepción de la empresa Micro Túneles, que realizó trabajos en dicho colector en los años 2011 a 2013, cuando gobernaba Benjamín Galván Gómez, fallecido a principios del 2015.
Destacó que en su momento, el NadBank aportó 150 millones de pesos para leste colector y que le correspondía 75 millones al gobierno municipal y una cantidad igual al gobierno de Tamaulipas, solo que este incumplió con su parte al no haber aportado el dinero que le correspondía, lo que afectó los proyectos, retrasó las obras, y modificó los presupuestos originales,
Sin embargo, dijo el consultor que finalmente el Nad Bank aportó el 62 por ciento del presupuesto, mientras que el restante 38 por ciento le correspondía a los gobiernos estatal y municipal.
A Micro Tuneles se le contrató para hacer 2,200 metros de tubería y solo instaló 199, equivalente al 8 por ciento y por ese porcentaje pretendía cobrar el 80 por ciento del total.

En la construcción del colector Campeche participaron las empresas Naves Industriales, Peña Palma, Rafael Hernández Roux, Micro Túneles. A todas les sobró tubería, de hasta casi tres metros de diámetro, por un valor de 23 millones de pesos, que se quedaron en calidad de depósito en un terreno frente al bulevar Ruiz Cortinas y que el ayuntamiento de Galván Gómez perdió por no pagar renta por tenerlos ahí.

Piede foto Luis Avila Rueda

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