*Los debates enriquecen la democracia: Yahleel Abdala
_______Línea Ágata_______
Por Francisco Pucheta González
El debate es saludable en cualquier democracia avanzada, porque enriquece y consolida las formas de hacer política pública con propuestas afines a las masas que se quieren apoyar. Se practica con éxito en Estados Unidos, Francia, Alemania, Italia, Inglaterra, Chile, etcétera y es también un escaparate para que el público mida y analice las capacidades del hombre o mujer que buscan posicionarse para ser su digno representante en los cargos de elección popular.
Por eso Yahleel Abdala, candidata del PRI a la diputación federal por el Primer Distrito Electoral con sede en Nuevo Laredo y la frontera chica, está en lo cierto al reconocer que los debates sirven de plataforma a las propuestas que la ciudadanía desea escuchar, para razonar su voto a favor de los contendientes.
Tiene toda la razón del mundo porque como candidata de un cargo tan importante deja constancia de una visión global de los temas que más preocupan a una sociedad cada vez más abierta como la del Distrito I, que supone con sapiencia que si los candidatos no saben debatir públicamente en su terruño, menos lo van a ser en el Congreso.
El debate parlamentario es para aquellos que han pasado las pruebas de fuego más difíciles, suficientes como para ocupar los escaños asignados sólo a gente preparada y dispuesta a discutir puntos de acuerdos favorables al gran electorado.
En la misma tesitura está Diana Chavira, candidata independiente, que acepta debatir con aspirantes a la diputación federal que estén a su nivel porque como ella dice, ´´me he sometido a la más férrea capacitación para ofertarle al electorado lo mejor que un representante social puede ofrecer ante el Congreso federal´´.
Chavira Martínez afirma estar dispuesta a debatir con todos siempre y cuando posean un nivel académico comparable al suyo, ´´para no ir a perder el tiempo´´.
Diana también es de la opinión de que el debate enriquece la democracia porque a través de este llegan las mejores propuestas que el ciudadano consciente valora o rechaza según la dirección en que se encauce.
Natalia García, la candidata de Encuentro Social también se declaró a favor del debate entre candidatos pues admite que se promueve en naciones de primer mundo como parte sustancial de su democracia y por ende se pueden discurrir las mejores propuestas que interesan a la comunidad en general.
Resumiendo, las tres féminas coinciden abiertamente que si llegan a San Lázaro no les temblará la voz para hacerse escuchar ante los demás legisladores.
Su postura es que hay que abrir el abanico de oportunidades para que los votantes conozcan las propuestas de cada uno de los candidatos y así elijan la opción que consideren mejor para su causa.