La presidenta Claudia Sheinbaum anunció que su Gobierno coordinará acciones con los estados para impedir la venta de vapeadores y evitar la creación de mercados ilegales, luego de que organizaciones civiles advirtieron que la prohibición aprobada por el Congreso podría abrir espacios para la operación del crimen organizado.
La mandataria defendió la reforma, al señalar que estos dispositivos representan un riesgo para la salud y que su regulación debe aplicarse de manera uniforme en todo el país.
“Los estados también tienen que participar en evitar la venta de vapeadores. Es un producto que hace mucho daño a la salud, entonces esto también va a ir acompañado después de una campaña informativa como siempre lo hacemos”, afirmó.
Sheinbaum subrayó que la idea de sustituir el consumo de tabaco tradicional por vapeadores es equivocada.
“Ahí está esta idea de que el no fumar tabaco, un cigarro, lo puede sustituir por un vapeador, y la verdad es que los vapeadores incluso en algunos casos hacen más daño que el propio cigarro. Entonces ni hay que fumar cigarros ni hay que utilizar los vapeadores y en este sentido va la legislación”, sostuvo.
Ante cuestionamientos sobre cómo se evitará que grupos delictivos controlen la comercialización clandestina, la presidenta aseguró que se establecerá coordinación directa con los gobiernos estatales “para poder evitar que se haga un mercado no legal de estos productos”.
La reforma aprobada por el Congreso prohíbe la fabricación, distribución y venta de vapeadores, y establece sanciones para quienes comercialicen estos dispositivos. El Gobierno federal prevé lanzar campañas informativas sobre los daños asociados a su uso y emitir lineamientos operativos para que las entidades federativas apliquen la norma.
