La presidenta Claudia Sheinbaum afirmó que debe hacerse justicia por el asesinato de Bernardo Bravo Manríquez, dirigente de productores de limón en Michoacán, y aseguró que el Gabinete de Seguridad federal colabora con la Fiscalía y el Gobierno estatal para dar con los responsables.
En conferencia en Palacio Nacional, la Mandataria calificó el crimen como un hecho «muy lamentable» y expresó su solidaridad con los productores de la región. «Es muy triste y lamentable la muerte de este dirigente de producción y comercialización de limón», señaló.
Bernardo Bravo Manríquez, presidente de la Asociación de Citricultores del Valle de Apatzingán, fue hallado sin vida el sábado en el camino Apatzingán-Tepetates, con el torso desnudo, huellas de tortura y un disparo en la cabeza.
Tres días antes de su asesinato, el dirigente había denunciado extorsiones, omisiones de las autoridades y la presencia del crimen organizado en el tianguis limonero de Apatzingán, donde advirtió que no permitiría la operación de intermediarios o «coyotes».
El caso es investigado por la Fiscalía de Michoacán con el apoyo del Gabinete de seguridad federal. Sheinbaum reiteró: «Está todo el Gabinete de Seguridad apoyando a la Fiscalía y al Gobierno en Michoacán para poder llegar a los responsables».
