Por Redacción SC.
Nuevo León, octubre de 2024. A diferencia de años anteriores, cuando para estas fechas ya se observaba un flujo continuo de mariposas monarca cruzando Nuevo León rumbo al sur de México, este otoño ha sido testigo de una migración notablemente escasa. Especialistas en fauna y observadores de la naturaleza han señalado que la temporada migratoria, que comenzó a mediados de octubre, ha mostrado avistamientos limitados y dispersos de estas emblemáticas mariposas.
Rocío Treviño, coordinadora del programa Correo Real, de la A.C. Protección de la Fauna Mexicana, afirmó que este es el primer año en casi 40 que lleva monitoreando el fenómeno, en el que las mariposas monarca han sido pocas y dispersas. «La migración viene un poco retrasada y muy escasa. Este año, hemos recibido pocos reportes de avistamientos, algunos días solo se ven dos o tres mariposas, y en otros no se reporta ninguna», explicó Treviño, quien destacó que esta situación es inédita.
Una de las principales causas que los especialistas apuntan para este comportamiento atípico de las mariposas es el clima anómalo en el norte de América. Las temperaturas más cálidas de lo habitual en Estados Unidos y Canadá han retrasado el «empuje» de las mariposas monarca hacia el sur. «Estamos esperando que venga el frío. Generalmente, las mariposas avanzan hacia el sur impulsadas por los frentes fríos del norte, pero este año no ha sucedido», añadió Treviño.
El impacto de las altas temperaturas no es el único desafío que enfrentan las mariposas monarca. La fumigación intensificada contra el dengue, especialmente en estados del norte de México, también está afectando a la especie, ya que los insecticidas son tóxicos para ellas a lo largo de su ruta migratoria.
En Nuevo León, donde tradicionalmente se reporta el pico de la migración en esta época, las mariposas han sido notablemente pocas en lugares emblemáticos como el Parque Ecológico Chipinque. Mientras que en años anteriores era común ver cientos de mariposas en un solo minuto, este año los investigadores del parque solo han registrado entre 10 y 15 mariposas en sus observaciones diarias.
Jonathan Morales, miembro del equipo de investigación de Chipinque, comentó que «aunque algunas mariposas están pasando, no al nivel que las hemos visto en años anteriores». La disminución en la cantidad de mariposas también se ha notado en otros estados del norte del país, lo que hace dudar de la posibilidad de que las mariposas hayan tomado un rumbo distinto o simplemente se hayan retrasado.
Otro factor que podría estar influyendo en el descenso de la población de mariposas monarca es el creciente impacto de la urbanización en áreas como el área metropolitana de Monterrey, según señaló Humberto Quiroz, investigador de la Facultad de Biología de la UANL.
La disminución de las mariposas monarca también se ha reportado en los bosques de hibernación en México. Según un informe de National Geographic de febrero de este año, el invierno pasado menos de una hectárea de estos bosques, ubicados en Michoacán y el Estado de México, estuvo ocupada por las mariposas, lo que pone en evidencia la disminución en su población.
En este contexto, los expertos insisten en la necesidad urgente de reforzar las acciones de conservación, tanto frente al cambio climático como contra el uso de pesticidas y la urbanización, para preservar la ruta migratoria de esta especie que sigue siendo fundamental para los ecosistemas de América del Norte y México.
El vuelo de regreso de las mariposas monarca hacia el norte comenzará en marzo de 2025, y se espera que en los próximos meses se pueda observar si las condiciones climáticas cambian y permiten una mayor actividad migratoria.
