En su número reciente, la revista Alquimia hurga en ‘El retrato familiar’
Desde lo íntimo se construye lo público, del núcleo parental parte lo social, con esta argumentación la revista Alquimia, del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), hurga en “El retrato familiar”, en su reciente edición.
Cuatro especialistas revisitaron álbumes familiares, propios y ajenos, para validar estas crónicas visuales que son tanto memoria privada como fuente historiográfica. En la selección de imágenes que hicieron para el número 76 de la publicación, “el lector encontrará la iconografía clásica de los retratos de estudio y registros menos elaborados, que dan cuenta de reuniones en los que la fotografía se usó para certificar un hecho memorable”, dijo el editor del órgano de difusión del Sistema Nacional de Fototecas (Sinafo) del INAH, Arturo Ávila Cano.
La revista se presentó en el Ex Colegio de la Santa Cruz de Tlatelolco, como parte de las actividades organizadas por el Acervo Histórico Diplomático, en el marco del Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor; ahí, el historiador comentó que el retrato familiar, como práctica de representación, parece estar en desuso, pero no es así.
“La normativa y la práctica del retrato se han transformado para responder a las dinámicas de la sociedad. Muestra de ello es la exposición Amor sin etiquetas, de Lizeth Arauz”, señaló Arturo Ávila, al resaltar la imagen de la portada: un retrato hecho en el estudio de los hermanos Valleto, en 1953, en que el rostro adusto de los hijos y la madre, vestidos de negro (salvo la menor, ataviada de primera comunión), reflejan el dolor por la pérdida del padre.
El director general del Acervo Histórico Diplomático, de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Joaquín Lozano Trejo, reiteró que los álbumes familiares representan una dicotomía pues, si bien, parten del ámbito privado, hablan de la vida pública; pero también la manera en que las personas quisieron ser representadas, a través de posturas, vestimentas y entornos, la cual estuvo condicionada por un momento cultural específico.
Hizo una invitación a investigadores e interesados para indagar en los fondos de la Fototeca “Amalia González Caballero de Castillo Ledón”, cuya variedad puede resultar inusitada. Lo mismo pueden encontrarse desde imágenes con aspectos del Ejército Constitucionalista en sus movimientos por el norte del país, Veracruz y Yucatán, hasta álbumes familiares, como los legados por el exsecretario de Relaciones Exteriores (1945-1946), Francisco Castillo Nájera.
En este número de Alquimia, publicación auspiciada por la Secretaría de Cultura federal, la fotógrafa Lourdes Almeida, la etnóloga Julieta Gil Elorduy y los historiadores Rosa Casanova y Miguel Ángel Rosas abordan los álbumes familiares desde lo personal, la reflexión antropológica y el estudio histórico.
Julieta Gil y Lourdes Almeida comparten parte de su quehacer en la preservación de la memoria visual de sus familias: ambas preservan retratos decimonónicos de estudio, y otros más, producto de la afición fotográfica de algunos de sus familiares. El primer caso abarca un arco temporal de dos siglos y cinco generaciones, empezando por la impronta del militar Cirilo José de Elorduy y Eketxe (1822-1867), combatiente de la Batalla de Churubusco.
Por su parte, Almedia, quien participó en la presentación editorial, expuso a las y los asistentes que, siendo niña, “disfrutaba de las fotos con sorpresa. Hoy siguen asombrándome, y también veo en las imágenes historias nunca contadas. Mi forma de mirar ha cambiado radicalmente, es como si los retratados cobraran vida y me contaran esos secretos desconocidos, los cuales busco al mirarlas.
“En mi colección de fotografía familiar hay desde un daguerrotipo hasta impresiones de imágenes digitales, pasando por albúminas, papel salado, colodiones, etcétera. Hay imágenes de gabinetes y fotógrafos reconocidos, como Cruces y Campa, Valleto y Cia., Emilio Lange, Maya y Cia., Napoleón de Barcelona, Apolonio Méndez, por mencionar algunos, y otras de autores desconocidos”, anotó al mostrar estampas de la vida privada de los García Noriega y Nieto del Castillo.
En Alquimia 76, el público también encontrará los ensayos Memoria familiar: el caso de Ezequiel Álvarez Tostado, de Rosa Casanova, y Esto ha sido la familia: Una arqueología del retrato familiar, de Miguel Ángel Rosas; aparte de las secciones: “Sinafo”, “Soporte e imágenes” y “Reseñas”. Puede adquirirse en el catálogo de revistas del INAH.