Luego del fallecimiento de Héctor Alejandro Méndez Ramírez, estudiante de primer grado de secundaria que fue arrojado contra la pared por sus compañeros, la madre del menor, Rebeca Ramírez, pidió justicia al señalar que ratificará su denuncia para que los responsables vayan a la cárcel.
Asimismo, Ramírez aseguró que la agresión a su hijo no se trató de un juego sino de un asesinato.
En entrevista radiofónica con Ciro Gómez Leyva, precisó que esta tarde ratificará su denuncia contra los niños que agredieron a su hijo, así como contra la profesora encargada del grupo.
– ¿Lo que está planteando es que los menores se vayan a un tutelar y la maestra a la cárcel?, le cuestionó el periodista.
“Claro que sí”, dijo la mamá de Héctor, quien añadió que ha recibido numerosos mensajes de apoyo tras el fallecimiento de su hijo y que por ello “debo permanecer de pie”; además de que tiene otros dos hijos. “He llorado mucho, ya mis ojos no tienen lágrimas”.
“Tengo que estar de pie porque queda mucho camino por recorrer, tengo dos hijos más y por ellos tengo que salir adelante”.
Así, la mujer dijo que espera justicia por el acto de bullying que provocó el deceso de su hijo, y consideró a los menores probables responsables como “asesinos”.
“Los asesinos son los niños e indirectamente los maestros, la maestra, como cómplices, como autores intelectuales (sic), porque tuvieron la oportunidad de ayudar a mi hijo (…) si tan solo me hubieran hecho una llamada, no hubieran movido el cuerpo de mi hijo, hasta que llegara la ambulancia, a lo mejor mi hijo estaría vivo”, refirió.
Asimismo, consideró insuficiente que los menores agresores reciban ayuda psicológica, pues “a mí no me ayuda; (tampoco) me ayuda que digan ‘ya cesamos a la maestra de grupo’, porque esa maestra la sacarían de la secundaria, pero yo cómo sé que está en otra escuela.
“A mí no me gustaría que otra madre pasara lo que estoy pasando. No me gustaría que mañana esa maestra estuviera dando clases en otra escuela y negara el apoyo a otro niño que lo necesite”.
El miércoles de la semana pasada, el estudiante del turno vespertino fue lesionado en un juego llamado “columpio”. Según explicó él mismo, cuatro de sus compañeros lo cargaron cada uno de sus extremidades, lo balancearon y después lo arrojaron contra una pared. Héctor se golpeó en la cabeza.
Desde el el 14 de mayo permaneció en estado grave en el Hospital Infantil, y este lunes cerca de las 14:00 horas fue declarado con muerte cerebral. Su corazón se mantuvo latiendo con equipo médico y medicamentos hasta el martes.
Rebeca dijo que su hijo nunca mencionó que lo molestaran en la escuela, “iba todos los días con muchas ganas”.
Este miércoles le dieron el último adiós a Héctor Alejandro, quien cursaba el primer año en la secundaria No. 7 “Eleazar Gómez”.
