Nacional

El empoderamiento de la mujer en México y dos tristes historias

Por: Vicente Hernández

“Las mujeres no serán iguales fuera del hogar mientras los hombres no sean iguales dentro de él”
«Gloria Steinem»

El pasado 8 de marzo fue conmemorado a nivel mundial “El día internacional de la mujer”, una conmemoración que en algunos países de Europa dio inicio el 19 de marzo de 1911, posteriormente ante el reclamo de las mujeres alemanas la fecha se cambio al 8 de marzo, y esta costumbre se extendió lo mismo en Alemania que en Rusia y Suecia.

En México solo de pocos años a la fecha se le da la importancia a este día, en el que se le rinde homenaje a ese ser tan maravilloso que es la mujer, pero es lamentable que solo un día al año se le brinde reconocimiento, y en los restantes 364 días a un buen numero de mujeres se le humille, se les viole, se les agreda, se les discrimine, pero lo peor aún, que se les asesine, especialmente en el México de la cuarta transformación, y que en el mayor de los casos los asesinos no reciban su merecido castigo, aun cuando este delito ha sido clasificado como feminicidio y su penalidad aumentada.

La marcha que organizaron el dia 8, y en la que marcharon más de 90 mil mujeres tan solo en la CDMX, y otras miles en una gran cantidad ciudades en diversos estados de la república, nos muestra una vez mas que el empoderamiento femenino sigue avanzando, aun en contra de los descalificativos machistas y misóginos que un día antes, y un día después, se lanzan desde palacio nacional, pero es innegable que aun con las 11 muertes diarias, con violencia de mujeres que se reportan de manera oficial el “Girl Power” sigue avanzando en comparación con el siguiente texto.

Hace ya varios años escribí parte de la vida de Mukhtaran Bibi, que a su vez la conto el columnista del The New York Times Nicholas de Cristof , periodista especializado en denunciar y luchar en contra de la esclavitud sexual en Asia, y del trabajo de este periodista rescato y vuelvo a transcribir ahora tan solo una pequeña parte de esta cruda historia, porque vale resaltar el coraje de esta mujer para denunciar su trágica violación, y después luchar para que a través de la educación y la superación de las mujeres de su aldea de Punjab Pakistán, y de todas las partes del mundo se defiendan y liberen de la opresión y degradación a que son sometidas por los hombres, y en algunos casos hasta por las mismas mujeres.

Mukhtaran una joven alta, delgada, que de niña nunca fue a la escuela vive en una empobrecida y lejana aldea de Punjab en el Pakistan, y esta es su historia: Como parte de una disputa local en el año 2002, un Consejo Tribal decidido castigar a su familia condenando a Mukhtaran a ser violada en grupo, ella suplico, y lloro, pero cuatro de sus vecinos la desnudaron y ejecutaron la sentencia, luego sus atormentadores la hicieron caminar hasta su casa desnuda, mientras su padre trataba de cubrirla de las miradas de más de 300 aldeanos.

Se suponía que Mukhtaran estaría tan avergonzada que se suicidaría, pero en una sociedad donde se supone que las mujeres deben de ser suaves, e incapaces, demostró ser indescriptiblemente dura, y encontró el valor para vivir, demando que sus atacantes fueran llevados a juicio, y seis fueron condenados a la pena capital, y ella recibió una compensación de 8 mil 300 dólares, y los utilizo para empezar dos escuelas en su aldea, una para niñas, y otra para niños, porque siente que la educación es la mejor forma para cambiar actitudes como la que condujeron al ataque en su contra, y analfabeta como era se inscribió en su misma escuela.

Historias como la de Mukhtaran se repiten día, con día, en todas las latitudes de la tierra, y en todos los estratos sociales, y precisamente otra de estas historias fue la que leí en un diario local, en la que interviene nuevamente un periodista, esta vez japonés y retirado de la agencia noticiosa Jiji de nombre Setsuo Naganuma, el cual relata y apoya la causa de miles de mujeres que fueron convertidas en esclavas sexuales por el ejército japonés durante la segunda guerra mundial.

La historia es contada por una de las sobrevivientes de nombre Loo Yong-Soon, quien a pesar de que el hecho ocurrió y afecto a por lo menos 200 mil mujeres en países ocupados por Japón entre 1931 y 1945, y aunque ya pasaron muchos años la pesadilla de la violación y posterior esclavitud sexual aun estaba fresca en la mente de Lee Yong-Soon, que en sus sueños como una película de horror recordaba el abuso sexual que con ella cometieron los soldados japoneses, a pesar que de esto ya hacía más de sesenta años.

A la fecha Lee Yong Soon con más de 90 años de edad, se ha convertido en el dedo flamígero que señala al gobierno japonés de haberlas convertido en esclavas sexuales del ejercito nipón en contra de su voluntad, y que contradijeron (en su tiempo) las declaraciones del Premier Shinzo Abe en el sentido de que no hubo coacción para llevar a las mujeres a los burdeles japoneses, insinuando que “fueron por su gusto” esta declaración enardeció a las mujeres sobrevivientes, pero en especial a Lee Yong, quien con lagrimas en los ojos relato su pesadilla vivida durante la segunda guerra mundial cuando apenas con 16 años fue raptada de su aldea para ser llevada a los burdeles militares y satisfacer los deseos sexuales de los militares nipones.

“Me sacaron de madrugada de mi casa (relata) y me llevaron a un burdel de Taiwan junto a otras mujeres, allí me sometieron a electroshock y me pegaron, mientras yo llamaba sin descanso a mi madre”. Este recuerdo que lleva impreso como una calcomanía mental la atormenta, pero no la doblega en su lucha en contra del gobierno japonés, del cual no busca una compensación económica si no una disculpa oficial por el abuso infligido a miles de mujeres sobre todo a chinas y coreanas durante los años de guerra.

Con la intención de lavar las heridas, y cicatrizar recuerdos, en 1993 el portavoz del ejército nipón Yohei Kono declaro que reconocía que el ejercito imperial recluto, y obligo a miles de mujeres a prostituirse como esclavas sexuales en burdeles militares, llamados elegantemente “Estaciones para el desahogo” ahora los legisladores pertenecientes al Partido Liberal Democrático y que actualmente esta en el poder, pretenden desvirtuar o corregir la declaración del Premier Kono, en la que reconoce el abuso del ejercito en contra de las cerca de 200 mil mujeres, por considerar que “Daña la imagen de Japon”

Estas dos mujeres Mukhtaran y Lee Yong, son tan solo una pequeña muestra de la entereza y valor que las mujeres en cualquier parte del mundo han demostrado, y siguen demostrando, pero no solo como ejemplos de supervivencia, de acontecimientos adversos en sus vidas, sino también como ejemplo mítico de Aves Fénix que desde sus cenizas resurgen vestidas sus almas con plumajes de un solo ideal: Dignidad, y respeto hacia las mujeres en cualquier parte del mundo.

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