De inmediato lo subieron a una camioneta y lo trasladaron al Hospital Pediátrico de Sinaloa, donde se hizo lo posible por salvarlo, pero no lo lograron
Una tragedia empañó la celebración del Año Nuevo en Sinaloa, pues el pequeño Jared perdió la vida tras ser alcanzado por una bala perdida cuando jugaba afuera de su casa.
Trascendió que el niño cayó al suelo repentinamente, lo que llamó la atención de sus familiares quienes al revisarlo se dieron cuenta de la sangre en su cabeza. Ahí notaron que algo no andaba bien.
El terror se apoderó de ellos y de inmediato notaron que había sido víctima de una “bala perdida”, por lo que de inmediato lo subieron a una camioneta y lo trasladaron al Hospital Pediátrico de Sinaloa, donde se hizo lo posible por salvarlo, pero ya nada pudo hacerse.
Jared fue víctima de la imprudencia que cada año se repite, a pesar del llamado que hace apenas unos días hizo el gobernador Rubén Rocha Moya, para que no se incurriera en esta práctica.
Por desgracia, el pequeño Jared no es el único caso de un niño alcanzado por bala pérdida, ya que esa misma noche se reportó el ingreso a un hospital de otro menor, quien acudió por una situación similar.
En este caso, los padres notaron que el niño comenzó a quejarse y llorar, por lo que al revisarlo notaron la herida de bala en su espalda.
Se estima que hay al menos otras dos personas alcanzadas por bala pérdida en Sinaloa, sin embargo, las autoridades no han dado a conocer el recuento oficial.
