Sin Filtros; por Brenda Ramos
Diversas denuncias a las que tuvo acceso en exclusiva el medio de comunicación Sentido Común, revelan que se ha abierto la investigación ante la Fiscalía General de la República y la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales en contra de dos altos funcionarios del Centro Nacional de Inteligencia, El Secretario General Lic. Saúl Parra Ibarra Director de Recursos Materiales y el Lic. Jorge Alberto Bernal Reyes.
En ellas, son acusados de abusar de sus cargos y utilizar sin autorización el nombre del director del CNI el General Audomaro Martínez para recolectar cerca de 100 MDP del crimen organizado gracias a la estrategia del “Huachicol Fiscal”, bajo la falsa premisa de que esta estratosférica cantidad sería inyectada en la campaña del doctor Américo Villarreal y a cambio serían cedidos a estos grupos los controles administrativos de la Secretaría de Finanzas y de las aduanas de Nuevo Laredo, Miguel Alemán, Camargo, Reynosa y Matamoros.
El tema de los funcionarios corruptos del Centro Nacional de Inteligencia había permanecido “aparentemente” detenido y sin novedad. Sin embargo, tal y como aseguramos anteriormente, las denuncias contra El Secretario General Lic. Saúl Parra Ibarra Director de Recursos Materiales y el Lic. Jorge Alberto Bernal Reyes ambos del CNI no tardaron en ser presentadas.
Se prevé que el tema causará impacto a nivel nacional, puesto que por medio de “Una carta abierta” del Colectivo “Américo Triunfa”, firmada por Manuel Hernández Contreras quien se identifica como Coordinador Estatal, difundida en diversos medios de comunicación estatales y nacionales como lo son MILENIO, EL UNIVERSAL, REFORMA y EL SOL DE MÉXICO se da a conocer la situación antes mencionada en Tamaulipas, la cuál incluye los números de las denuncias realizadas.
En uno de los párrafos con fecha 14 de octubre del 2022 se lee:
“Exhibir la verdad, es factor fundamental para fincarles responsabilidad a los empleados involucrados y particularmente rescatar la integridad del Centro Nacional de Inteligencia (CNI). En este caso se hará colaboración a la denuncia interpuesta el 28 de julio de 2020 ante la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia organizada DENUIF -65-2020 que involucra a Luis Rivera, José Ramón Gómez Leal y Marcos Guerra; de igual forma ante las autoridades investigadoras de la Fiscalía General de la República hoy se ha presentado denuncia registrada bajo el siguiente folio CEDAC-070049-2022-10-WEB en contra de los servidores públicos en funciones y sus actividades punibles.
Se sigue desconociendo quien es en realidad la “La mano que mese la cuna” detrás de estos funcionarios o a donde fue a parar esta millonaria cantidad de dinero. Es imposible que no surja esta incógnita ya que esto sucedió durante el gobierno del ex mandatario Francisco García Cabeza de Vaca, del que se sabe que mediante sus GOPES y su equipo de inteligencia tenía todo el control del estado, por lo que no se movía un alfiler sin que ellos lo supieran.
Durante la campaña del doctor Américo Villarreal, así como después de su triunfo como gobernador de Tamaulipas, surgieron un sinnúmero de ataques fraguados por la oposición, tratando de inculpar tanto a él como a su familia de una lista interminable de delitos, transacciones millonarias y relaciones con el crimen organizado, que fueron desmentidas una a una.
Sin embargo, jamás se habría esperado que un golpe en contra del ahora gobernador viniera de funcionarios Federales pertenecientes a la Cuarta Transformación, que a su vez también traicionaron a la institución a la que pertenecían y la cual ya se encuentra investigando al respecto, habiéndose filtrado información de que el titular de la CNI General Audomaro Martínez Zapata, no dejará sin consecuencias legales a estos corruptos funcionarios por enlodar con sus actos y mentiras tanto la institución, el nombre de su titular y el del doctor Américo Villarreal, así como la imagen del presidente AMLO y su Cuarta Transformación.
Este tema apenas empieza, ya que las consecuencias por la desaparición del dinero y las promesas realizadas al crimen organizado bajo un esquema de mentiras están por estallar. Se teme que los resultados sean una nueva ola de violencia en el estado y se ruega porque las autoridades actúen para evitarlo haciendo valer la justicia contra estos corruptos servidores públicos así como para sus cómplices y verdaderos manejadores que les permitieron operar impunemente durante meses en Tamaulipas.