Sin Filtros; Por: Brenda Ramos.
“En México se mata porque la vida es barata, porque la impunidad es absoluta, porque el desmadre es identidad; se mata porque los “valores” son una mera ilusión y la religión un pasatiempo de coleccionar afiches. En México se mata, porque en México los malvados tienen vía libre y los demás tenemos miedo” Gerardo Enrique Garibay Camarena.
No encuentro palabras más atinadas que estas para describir la carnicería que sucedió en Estadio Jalisco el día de ayer durante el partido Querétaro vs Atlas. Los ánimos de las aficiones escalaron a un nivel en el cual no hubo punto de retorno.
La venta excesiva de alcohol que no es regulada en los partidos y solo beneficia a las grandes industrias cerveceras, combinada con mentes dañadas de unos delincuentes propició una brutal masacre, no hubo compasión para ancianos, hombres, mujeres o niños, quienes asustados corrían por su vida, rezando en su interior para no ser atacados por estos locos, poseídos por la ira, teniendo que escuchar los gritos de aquellos que eran golpeados sin parar en el piso y desnudados por sus verdugos.
Un burdel de marcas; negocio redondo
Y es que desde hace años el futbol mexicano perdió su autenticidad, de ser un deporte familiar que se disfrutaba los domingos se fue transformando hasta convertirse en un burdel de marcas portadas en los uniformes de los jugadores.
CORONA, CARTABLANCA, TELCEL y muchas más marcas son las que vemos en lo que un día fueron uniformes de futbolistas que anteriormente solo contenían el numero y nombre del jugador asi como el escudo y nombre del equipo.
Pero las autoridades encargadas de regular y supervisar este deporte, en México la Federación Mexicana de Fútbol Asociación, A.C., Confederación Deportiva Mexicana y alrededor del mundo la FIFA, CONCACAF, junto con las grandes marcas nacionales e internacionales, convirtieron los torneos y juegos en un vulgar burdel de marcas, un negocio redondo gracias a los millones de espectadores que compran los productos de los patrocinadores.
No es la primera vez que la violencia esta presente en el futbol y esto sucede debido a la indiscriminada venta de cerveza que calienta los ánimos desatando las pasiones de los agresivos asistentes, pero se agrava con la falta de mantenimiento de los lugares, la mala organización de los eventos en los cuales no hacen una buena revisión a quienes acuden y ya dentro con tal de ahorrarse unos pesos, no hay suficientes elementos de seguridad que puedan controlar problemas tan grandes como el de ayer.
Los comunicados del gobierno vs las imágenes de redes sociales
Por otro lado, los estados en donde se realizan los partidos de futbol son beneficiados con las millonarias ganancias, pero su ambición es tan grande que no pueden aumentar la cantidad de elementos de seguridad para custodiar y atender afuera de los partidos, mucho menos gastar en cursos para capacitarlos contra eventos violentos, a pesar de ser tan comunes.
Y es que las autoridades del estado de Querétaro empezando con su gobernador panista Mauricio Kuri Gonzalez, están tratando de minimizar la situación, asegurando que la cantidad de afectados es de 26 y solo 3 se encuentran en estado de gravedad pero que no ha habido ningún muerto; otra que causa vergüenza es Guadalupe Murguía, secretaria de gobierno de Querétaro, quien tratando de evitar que la situación se hiciera más mediática declaro: «Es delicado dar datos que no están confirmados y esperaremos la información del Fiscal»
Por otro lado, personajes como el comentarista Ricardo Jimenez asegura desde su cuenta oficial de twitter que miembros de la Barra51 le confirman Esteban Hernandez Martinez alias “El Razor” es uno de los fallecidos. Además, circulan en redes sociales, videos, imágenes y testimonios que aseguran que lamentablemente sí hubo personas que fallecieron por los brutales ataques. De ser ciertas las versiones declaradas por los afectados, los medios de comunicación estarían siendo cómplices con su desinformación y su silencio, ya que en las fotografías y videos virales se pueden observar personas que se encuentran desnudas e inertes, bañadas en sangre, siendo casi imposible para cualquier ser humano sobrevivir en esa situación.
Concluimos con lo siguiente: a casi 24 horas después de los lamentables y aberrantes sucesos en el estadio Corregidora no hay detenidos, personas afectadas declaran que, si hay muertos, pero la Liga MX y el Gobierno de Querétaro y Guadalajara se lavan las manos negándolo todo y dejando sin castigo a los delincuentes, asi de podridas las cosas en México, en donde el delincuente reina y el inocente no tiene justicia.
