No hay cambios en los templos
Los templos esta frontera son los de las pocas actividades “no esenciales” que conservaron sus reglas de operación y horarios, pese a estar en semáforo rojo.
El Comité Estatal para la Seguridad en Salud, determinó que pueden operar al 50 por ciento durante 5 días a la semana, sin que esto implique aglomeraciones o eventos masivos.
“Deben cancelar visiblemente los espacios entre las bancas, conservando el respeto a la sana distancia entre personas, además de comprobar la realización de desinfección al término de cada servicio”, se lee en el Periódico Oficial.
Las iglesias deben mantener un solo acceso a los fieles, y estos comprometerse a llevar cubrebocas, pasar por una prueba de temperatura, limpieza de calzado y uso de gel antibacterial.
Desde marzo del 2020, la Diócesis de Matamoros exhortó a los clérigos a modificar la entrega de eucaristía, de la boca a la mano de los fieles, al igual que omitir el saludo de paz que formaba parte de la conclusión del servicio.
También se adaptaron y crearon redes sociales para transmitir los servicios.
En este verano, no destacan actividades más allá de las misas, por lo que en la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, se prioriza la participación de los fieles a transmisiones en vivo, con solo la asistencia presencial de quienes no forman parte de algún sectores de riesgo, como adultos mayores, mujeres embarazadas, menores de edad o enfermos.
Todos los días en estos cultos se ofrecen servicios a los enfermos por Covid-19, víctimas mortales y sus familiares.
Estas reglas, continuarán por lo menos hasta el 31 de julio, ya que a partir del 1 de agosto el comité estatal para la seguridad en salud realizará actualizaciones.