La historia de violencia en Tamaulipas y de la ineptitud e indolencia del gobernador Cabeza de Vaca, es retratada en la película “La Civil”, filmada en Durango, que causó sensación en el Festival de Cannes, donde compite por los principales premios.
La exhibición de este filme, de dos horas de duración, recrea el secuestro y asesinato de una adolescente, ocurrido en San Fernando, que fue investigado por su propia madre, debido a que el gobierno estatal no le puso suficiente atención al caso.
Como resultado del trabajo personal que hizo la mamá de la muchacha, los culpables fueron detenidos y encarcelados. Sin embargo, tiempo después se produjo una fuga de reclusos en el penal estatal.
Algunos de los secuestradores de la adolescente de San Fernando iban entre los peligrosos delincuentes prófugos.
La mamá de la chamaca secuestrada y asesinada tuvo miedo de que fueran por ella para hacerle daño y pidió protección a los funcionarios del gobierno de Tamaulipas. Le dijeron que sí, pero no le cumplieron, y un 10 de mayo fue asesinada a balazos en su propia casa.
La ejecución de la señora Miriam Elizabeth Rodríguez ocurrió en 2017. Los autores siguen prófugos.
Cuando andaba en campaña, Cabeza de Vaca prometió justamente en San Fernando, que con él en el palacio de gobierno, se acabarían los secuestros y otras expresiones de violencia. Pero eran mentiras. Tamaulipas está peor que nunca.
La buena noticia es que Pancho va de salida y nos deja la experiencia de un gobierno fallido y el suficiente escarmiento para no volver a votar por el PAN.
Cambiamos de tema para felicitar a la legión de amigos de la columna que tienen como profesión universitaria la abogacía. En el pasado, el profesor y el abogado eran dos personajes favoritos de la sociedad mexicana.
El profesor, por la noble misión de educar a las nuevas generaciones, y los abogados, por su propensión a defender causas justas, en beneficio de la sociedad.
Nos honra la amistad personal de Roberto Yolotl Flores Peña, profesor y abogado de Río Bravo. Nunca faltan en ninguna planilla edilicia un maestro y un abogado, por su identificación con las bases sociales, vienen de la entraña del pueblo.
Conocimos en Nuevo Laredo, en la década de los 70, a un Abogado del Diablo, que también los hay, que defienden causas desesperadas. Abelardo Perales Meléndez es un hombre de leyes fuera de serie, rara avis, garbanzo de a libra. Cuando su colega Humberto de la Garza Kelly renunció a la presidencia del Supremo Tribunal de Justicia de Tamaulipas en protesta por un acto de corrupción de un subalterno suyo, solapado por Emilio Martínez Manautou, el magistrado Perales Meléndez también se fue con él, en muestra de solidaridad.
Pero vueltas que da la vida, porque ese mismo abogado Perales Meléndez es ahora el abogado general del gobierno del panista Cabeza de Vaca. Una descomunal incongruencia.
Por la facilidad de palabra, su conocimiento de las leyes, las relaciones, carisma y otras características, los abogados fueron mucho tiempo los personajes que dominaban la cosa pública. La política era lo suyo, pero la fatiga del tiempo hizo mella en esta profesión y fue desplazada por otras, la de economía principalmente. El más reciente gobernador de Tamaulipas egresado de una escuela de leyes fue Praxedis Balboa Gojon… hace 52 años. (1963-1969).
Desde entonces han desfilado por la oficina principal del palacio de gobierno administradores de empresas, ingenieros, economistas, médicos.
De los actuales precandidatos a Gobernador, solo dos son abogados, Carmen Lilia Canturosas Villarreal, de Morena (Nuevo Laredo), y Édgar Melhem Salinas, del PRI (Río Bravo). José Ramón Gómez Leal es administrador de empresas y Rodolfo González Valderrama (ambos de Morena) es licenciado en sociología.
En temas locales, no sabe Eduardo Gattas la que le espera en materia de bacheo de calles cuando asuma el poder municipal victorense, el 1 de octubre. Xicoténcatl González Uresti y Pilar Gómez Leal, del PAN, le heredarán un tiradero. Manejar vehículos en la capital de Tamaulipas es como meterse en un laberinto, desplazarse en zigzag, brincar de un tramo asfaltico a otro, para no caer en un hoyanco, grande, profundo, rotundo y contundente, donde se rompen llantas, rines, flechas, rótulas, suspensiones.
El propio centro de la ciudad, llamado también primer cuadro, es un cuadro de horror, donde fluyen espontáneamente recordatorios familiares para los funcionarios municipales, cuando los vehículos van dando tumbos de pozo en pozo. Existe un procedimiento judicial para demandar al Ayuntamiento la reposición del dinero que un particular gasta en la reparación de averías mecánicas de su vehículo, pero es tortuoso, lento, prolongado y fastidioso, aunque finalmente le conceden la razón.
Gattas se fue de vacaciones en lugar de dedicarse a empezar a armar un equipo de trabajo en el que hará descansar la responsabilidad de cumplir los compromisos que hizo con los ciudadanos que le dieron el voto.
No son tiempos de fiestas ni de descansos, sobre todo para él, que cumplió finalmente su obsesión de estar al frente del gobierno municipal.
Debiera Gattas tomar el ejemplo de la presidenta municipal electa de Nuevo Laredo, Carmen Lilia Canturosas Villarreal, también de Morena, que en lugar de andar mondadeando, ya empezó a hacer trabajo en favor de las familias vulnerables.
Carmen Lilia encabezó brigadas de recolección de basura en algunas colonias y, más recientemente, repartió lentes entre personas de escasos recursos económicos.
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