Por Alberto Guerra Salazar
CRONICAS POLITICAS
CIUDAD VICTORIA, (ASI).— Muy valiente la carta redactada por el presidente municipal de Matamoros, maestro Mario Alberto López Hernández, pues sin perder mesura, prudencia, respeto y comedimiento, rechaza la argumentación del gobierno estatal, para hacerse cargo durante un año, del manejo de la seguridad pública.
Lo dijimos en este espacio en la colaboración anterior, pero ahora es la primera autoridad de Matamoros quien lo afirma: Matamoros no tiene policía municipal, de lo que se desprende que no pudo actuar para enfrentar una situación de violencia que desquició las actividades cotidianas en algunos sectores.
Pero Mario Alberto encontró un lado positivo al decreto gubernamental que concede al gobierno estatal, el manejo de la policía preventiva de Matamoros, y lo explica de esta manera, con sus propias palabras:
“Respetuoso de las facultades del Gobernador Constitucional del Estado de Tamaulipas y particularmente en lo que se refiere al rubro de seguridad pública, sin duda que el determinar que en Matamoros existirá un cuerpo policiaco capacitado y equipado para proteger y proporcionar seguridad a la población, al asumirse directamente el mando de las corporaciones de seguridad en el municipio, será una acción que repercutirá en beneficio de todos los habitantes de Matamoros, quienes siempre han sido la prioridad en mi administración”.
En otros temas, todavía no se reponía el PRI tamaulipeco del cisma provocado por la abrupta destitución de Copitzi Hernández García como dirigente de la ONMPRI, perpetrada a mansalva por Montserrat Arcos Velázquez, cuando se produjo otra formidable sacudida.
Ahora es Tomás Gloria Requena el que se encargó de asestarle un golpazo al partido tricolor, con su sorpresiva decisión de renunciar a su pertenencia de toda la vida, y engancharse al Partido Verde Ecologista de México.
¿Al Partido Verde?, ¿No al PAN o MORENA?, ¿Y a cambio de qué?.
Gloria Requena fue diputado federal y presidente municipal de San Fernando, además de haber hecho carrera en la Ciudad de México, ocupando cargos ejecutivos en la Confederación Nacional Campesina.
Y de buenas a primeras, Tomás avienta el arpa tricolor y se embarca en otras aventuras políticas, estrenando el cargo simbólico de secretario adjunto a la secretaría general, del CEN del PVEM.
Se está desgranando la mazorca y el riesgo es que no quede nadie que se encargue de cerrar la puerta. No es ninguna exageración, pero se habla de que puede el PRI hasta perder su registro como partido.
El Partido Verde en Tamaulipas es un fantasma. No tiene presencia, no tiene padrón, no tiene base. Anteriormente la franquicia era propiedad de un sureño, Jesús González Macías, que se alternaba la diputación local con Patricio King López.
Pero de algún modo misterioso fueron desplazados y ahora el detentador del partido es el joven Ricardo Gaviño Cárdenas, emparentado con Gustavo pero sin vínculos políticos, ni siquiera se frecuentan.
Gaviño es un profesional de la mercadotecnia política y comercial en redes sociales, y es su primera incursión en la cosa pública. No lo descarten como candidato plurinominal.
El Borrado Arturo Sánchez Garza, hijo de la desaparecida periodista Cuquis Garza, es cercano colaborador de Gaviño, y ya fue candidato verde a diputado local.
Tomás Gloria Requena dejó en el PRI un olor a azufre y su incorporación al Verde seguramente se reflejará en actividades de carácter federal, es decir, con un activismo en la Ciudad de México.
A propósito de la metrópoli, causó escozor el anuncio del Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Luis María Aguilar Montes, en el sentido de rechazar el pedido del Presidente López Obrador, de que autoricen una consulta nacional sobre enjuiciar a ex Presidentes de la República.
La Corte está en un predicamento, porque activistas de MORENA les entregaron más de dos millones de firmas ciudadanas, respaldando la solicitud de llevar a juicio a cinco ex Presidentes.
Aguilar Montes ya se echó para atrás con el pretexto de los Derechos Humanos de los mandatarios, pero la moneda sigue en el aire.
Es un problema complejo porque ponerlos en el banquillo de los acusados, implica revisar los usos y costumbres del sistema político nacional, antes intocables y hoy satanizados, por efectos de la llegada de la Cuarta Transformación al Palacio Nacional.
Por el rumbo del palacio victorense, Xicoténcatl González Uresti consiguió desembarazarse momentáneamente del asedio de la prensa, pues Teresa Aguilar Gutiérrez acaparó los reflectores.
La dama no parece molestarse porque los periodistas la intuyan como la super-mujer convocada para resolver tooodos los problemas de Ciudad Victoria, pues lo mismo le atribuyen tener una varita mágica para desaparecer los baches, así como las montañas de basura.
Ella simplemente se deja querer y defiende a su patrón con la afirmación de que no toda la culpa es suya, pues los ciudadanos, dice, no hacen lo que les corresponde y por eso Victoria “es un mugrero por todos lados”.
Teresa está entusiasmada con su trabajo de directora de análisis y estrategia y es de desearse que consiga resultados a corto plazo. Su antecesor se cansó de picar piedra y desistió cuando quedó convencido que Xico es una buena persona, pero con mentalidad dispersa.
Por su parte, el cártel de Gobernadores de Acción Nacional volvió a fracasar ayer en la Ciudad de México, en su táctica de echarle montón al Presidente de la República, con su cantaleta de pedir más dinero, en 2021.
El presupuesto federal de egresos es apenas un proyecto y viene acotado en recursos porque habrá una caída en la recaudación fiscal como consecuencia de la epidemia de Covid-19.
Pero el GOAN y asociados se desgañitan exigiendo más dinero. Cabeza de Vaca, a la cabeza de los plañideros.
Ayer se hicieron bolas en el tribunal electoral del poder judicial de Tamaulipas, pues no atinaron a resolver satisfactoriamente el pedido del diputado local Rigoberto Ramos Ordóñez, de sus recursos de apelación contra el IETAM, y decidieron graciosamente sobreseerlos.
Esto significa que todo sigue igual. Ramos Ordóñez, se inconformó contra el IETAM, porque le aplicaron sanciones atendiendo a denuncias del PAN, pero negándole el derecho de defenderse.
Los consejeros electorales actuaron unilateralmente, con prejuicio, sin informarle a Rigoberto de los cargos imputados, y ahora el tribunal le hace al Tío Lolo para dejar en la impunidad esta agresión a sus derechos políticos.
IETAM y el tribunal, lo dicen todos, obedecen instrucciones del palacio de gobierno.
En temas amables, Blanca Leticia Guerra Guerrero recibió título de licenciada en actuación, pues pasó cuatro años en la Escuela Nacional de Arte, de la Secretaría federal de Cultura, aprendiendo esa profesión.
Es nativa de Reynosa, hija de Angel Alberto Guerra y la señora Leticia Guerrero. Ya habrá tiempo para las celebraciones.
Cumple años el licenciado Víctor Manuel Sánchez Puente. La niña María Elizabet cumple 11 meses de nacida, hijita del abogado Jorge Sánchez Fernández y María Amaro Portales. El abuelo comparte la felicidad, Jaime Sánchez Bravo.
En Río Bravo dejó de existir el periodista Rubén Martínez Quintana, a quien todos sus amigos llamábamos el ingeniero.
En Tampico, un policía estatal fue herido a cuchilladas por familiares de una niña de 12 años, a quien el uniformado causó perjuicios, en La Borreguera.
