Garrafal error contra los tamaulipecos que CDV no aceptara el INSABI; Personal médico y sociedad civil, desprotegidos
La decisión de Francisco García Cabeza de Vaca de no adherirse al Insabi ha costado a los tamaulipecos en general y al personal médico quedarse sin cobertura social; sólo en Nuevo Laredo son más de 267 mil personas -previamente estaban inscritas en el Seguro Popular, hoy Insabi- que ahora tendrán que pagar atención particular para atenderse de una urgencia de salud ajena al Covid, mientras que al menos 200 médicos y enfermeras que luchan contra el coronavirus en la localidad no tienen una basificación y otras prestaciones básicas de ley.
A esto se suma la falta de insumos y equipo para los hospitales públicos, como en el caso del Hospital General Solidaridad, que en el que el techo se filtra el agua en cada lluvia, problema que tiene más de dos años y que no se ha podido solucionar, además de contar con equipamiento médico viejo y obsoleto que dificulta la labor del personal que hoy está destinado en su totalidad al área Covid 19.“
Tenemos la esperanza que el presidente Andrés Manuel López Obrador haga algo por el Sector Salud, ya que él ha ofrecido programas, uno de ellos es el Insabi, que se ha estado brindando para varios estados, los cuales ya firmaron varios gobernadores, y por medio de éste, mucho personal de Salud ya fue basificado.
Aquí el problema es que nuestro Gobernador no aceptó el programa, por lo que el personal de Salud de Tamaulipas está afectado”, declaró Alejandro Sánchez, enfermero del Hospital General Solidaridad.Ahora los más de 200 empleados luchan porque se les dé un trato igualitario, ya que los riesgos de contagiarse de enfermedades infecciosas como el coronavirus, el VIH, hepatitis, tuberculosis, entre otras, son las mismas que las de un basificado, pero a diferencia de ellos si algún eventual se complica y muere, su familia queda desprotegida.
“El gobierno nos trata como plaga, como apestados y todavía seguimos creyendo en los políticos”, dijo Antonio Medina.
CUESTIONAN A CDV
Entre los principales cuestionamientos de los tamaulipecos al actual gobernador en el marco de la crisis de salud derivada de la pandemia, se encuentra la falta de convenios con hospitales particulares o alguna medida para atender los padecimientos ajenos al Covid-19, como el caso de los ciudadanos sin seguridad social que con la restricción del Hospital General “Solidaridad” de atender sólo a pacientes de coronavirus, dejan en el desamparo a aquellos que tampoco cuentan con la solvencia para ser atendidos en un nosocomio particular.