ALFONSO RAMÍREZ CUÉLLAR, un político zacatecano ligado desde su juventud a las corrientes de izquierda, fue ratificado por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, como presidente interino del Movimiento de Regeneración Nacional, lo que podría ser un intento serio y determinante para dar a ese partido lo que hasta ahora no ha podido lograr: la identidad propia.
El también diputado federal, que preside la influyente comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara Baja, había sido designado en una asamblea nacional extraordinaria que depuso a quien ejercía el cargo también de manera provisional, YEIDCKOL POLENVSKY, quien se inconformó por considerar que había sido un “golpe de estado” en el cual no se cumplieron las formalidades esenciales del procedimiento.
Pero el TEPJF consideró, por mayoría, que la asamblea extraordinaria se apegó a los estatutos de MORENA y que, efectivamente, sus efectos eran válidos.
RAMÍREZ CUÉLLAR es un antiguo aliado de ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR desde los tiempos en que ambos militaban en el Partido de la Revolución Democrática, del cual salieron al considerar que se habían perdido los objetivos originales.
Aunque YEIDCKOL fue también una pieza importante en la campaña del actual presidente de la república, dista mucho de poseer la experiencia necesaria para nadar en un mar político lleno de tiburones. Pero se mantenía en su cargo, más por gratitud de AMLO, que por su efectivo control del partido. Así que su relevo, aunque no haya sido ordenado por el jefe máximo, sí fue, al menos, consentido.
MORENA fue un movimiento que en dos años creció de manera sorprendente bajo el liderazgo de LÓPEZ OBRADOR como una reacción a los gobiernos priistas y panistas que a juicio de la ciudadanía no supieron atender las inquietudes y necesidades de un México con hambre y sed de justicia, como dijo LUIS DONALDO COLOSIO.
Y AMLO arrasó en las elecciones llevando consigo la mayoría en el Congreso de la Unión y en más de la mitad de las legislaturas estatales.
Pero, en sí mismo, el Movimiento de Regeneración Nacional nunca ha logrado consolidarse como verdadero partido, pues en muchas entidades federativas y municipios, no cuenta con las estructuras territoriales convenientes para hacer frente a nuevos retos electorales, como el del 2021.
En Tamaulipas, el único cuadro visible es en Ciudad Madero, donde el actual alcalde, ADRIÁN OSEGUERA KERNION, supo conformar las bases necesarias para lograr el triunfo. Pero ese capital político es suyo y no del partido que ni siquiera, al menos que se sepa, tiene comité municipal.
Lo mismo pasa en Altamira y en Tampico, donde no hay cuadros directivos visibles y ni siquiera los diputados federales de esa corriente, ERASMO GONZÁLEZ ROBLEDO y OLGA SOSA RUIZ hacen labor visible en favor del partido que los llevó a la representación social. Vaya, ni siquiera los senadores AMÉRICO VILLARREAL ANAYA y GUADALUPE COVARRUBIAS alzan la voz para defender al presidente frente a los cotidianos ataques de que es objeto. Por eso AMÉRICO está lejos de ser candidato a la gubernatura.
Pero con un político, político, en la conducción nacional, las cosas podrían cambiar en MORENA con miras al proceso electoral de 2021, que será uno de los más importantes de la historia en México.
ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR ha dicho que él no es jefe de su partido y que no mete las manos en su operación interna. Se necesita ser muy ingenuo para creer tal cosa.
Se podrá estar o no de acuerdo con su quehacer al frente de la Nación, pero nadie puede negar su sagacidad política que le permite mover sus cartas de la manera que considere conveniente. Y parece ser que ahora está dispuesto a que MORENA consiga, como partido una identidad propia de la que hasta ahora ha carecido para que se convierta en una auténtica herramienta y deje de ser el apéndice que sin estar él en las boletas sea solo un membrete. Habrá que estar pendientes.
Y ya que hablamos de lides electorales, para muchos analistas no pasa inadvertido el protagonismo que está realizando el senador ISMAEL GARCÍA CABEZA DE VACA, quien con diversos pretextos recorre el territorio tamaulipeco. Son muchos los que consideran que esto forma parte de un experimento para incluirlo en la lista de los posibles prospectos a la candidatura del PAN a la gubernatura, junto con el líder del Congreso local, GERARDO PEÑA FLORES. Hay que seguirle la pista.
Pero vea usted que también ya hay quienes insisten en que el alcalde de Tampico, JESÚS NADER NASRALLAH, tiene las prendas necesarias para ser tomado en cuenta para la gubernatura, aunque todo parece indicar que él tiene centrada su atención en ser reelecto al frente de los destinos de la tierra de jaibas.
Cambiando de tema, ya no se habla sobre la ocupación integral del nuevo mercado de Tampico que a poco de su entrega al municipio porteño solo sirve para que se hagan visitas guiadas para conocer las modernas instalaciones que aún no están terminadas del todo, pues en su interior aún se escuchan sonidos de taladros, martillos, palas y otras herramientas, signo de que todavía se trabaja en los acabados.
¿Estarán funcionando para Semana Santa, como se proyectó? Habrá que verlo.
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