MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA
“El tema como casi todo en la vida tiene otro lado de la moneda, porque Aguascalientes es de los 9 estados que no se adhirió al INSABI y el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ya dijo que no les dará más que lo que por ley les corresponde para salud”
Claro que nada justifica que un gobernador se dirija con palabrotas en público, menos si estas llevan la carga negativa de cuando hay enojo en ellas, menos aún cuando el mandatario con todas sus letras manda a la “chingada” a enfermos y no precisamente al rancho de AMLO.
Así es mis queridos boes, ayer el gobernador de Aguascalientes Martín Orozco Sandoval, quien además preside el GOAN; asociación de gobernadores panistas, explotó advirtiendo que su estado no dará servicio médico a pacientes que no sean de sí estado.
«(Pacientes) de estados que no sean de Aguascalientes, a la chingada […] Yo no puedo atender a estados», dijo
Condenable la expresión del panista, porque insisto que habla de los más pobres, esos que se suponía serían la prioridad de la 4T y que en realidad han sido los más afectados con el desgarriate que las malas decisiones han provocado en el sistema de salud.
Según el gobernador azul de Aguascalientes, el 25 por ciento de los gastos en pacientes que atienden los hospitales de su estado lo erogan en enfermos de entidades vecinas, a los que dijo ahora mandarán allá a la tiznada.
El tema como casi todo en la vida tiene otro lado de la moneda, porque Aguascalientes es de los 9 estados que no se adhirió al INSABI y el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ya dijo que no les dará más que lo que por ley les corresponde para salud y que no un solo peso de la bolsa de 40 mil millones extras qué hay para el rubro, porque no quisieron ‘regalarle’ a la 4T los hospitales estatales.
Desde ese punto de vista tiene razón el gobernador panista, porque AMLO y su 4T apenas le mandarán para que atienda a sus pacientes y no a los de otros estados.
Y es aquí donde el tema aterriza en Tamaulipas, sobre todo en la zona metropolitana de Tampico, Madero y Altamira, área que carga con una población flotante que supera por mucho los 120 mil ciudadanos de la huasteca veracruzana, potosina y algo de Hidalgo que todos los días acuden a trabajar, estudiar, de compras y ojo: a curarse en los hospitales cuerudos.
Es un gasto millonario el que hace Tamaulipas en la atención de dichos pacientes, que no tienen de otra, más que brincarse el río Pánuco, porque en todo el norte de la entidad jarocha no hay infraestructura casi de nada.
A los hospitales de Tampico y Madero llegan baleados, acuchillados, embarazadas de urgencia en busca de salvar la vida y acá se les salva.
El gobierno de Veracruz no mueve un dedo por ellos, Cuitláhuac García es un cero a la izquierda para sus gobernados de Pánuco, Ozuluama, Pueblo Viejo, Tampico Alto, Tantoyuca y puntos intermedios.
Basta revisar los periódicos atrasados de Tampico, La RAZóN para que no haya errores, para encontrar notas que relatan que el 40% de los pacientes del Hospital Civil no son de Tampico, sino de la región huasteca fuera de los límites de Tamaulipas.
El 50% de los partos que se atienden en el Hospital Carlos Canseco son del norte de Veracruz, misma cifra de los pacientes de cáncer, la mayoría de los niños que se atienden también son de aquella zona.
Obviamente que el gobernador de Tamaulipas Francisco Javier García Cabeza de Vaca no ha mandado a nadie a la tiznada y no lo hará, porque la solidaridad de Tamaulipas es evidente, lo ha sido por décadas con los hermanos de Veracruz y los potosinos que ven a Tampico como la capital de la huasteca.
Pero, hay que reconocer que con la reforma al sistema de salud que impuso AMLO, algo se tiene que hacer con los gastos que entidades como Tamaulipas hacen en pacientes que no son de su jurisdicción.
Son millones de pesos los que se invierten en la salud de estos, mientras gobernadores como Cuitláhuac García de Veracruz exhiben su desdén por sus enfermos.
Porque hay que recordar que Veracruz es un estado que gobierna MORENA, de los que más recursos federales ha recibido y de los que más recibirá para salud.
¿No tendría que pagar Veracruz los gastos de sus enfermos que Tamaulipas atiende?, y no se trata de discriminar, pero los recursos federales que llegan al jarocho para atender a sus pacientes que tienen que cruzar a Tampico los gasta Tamaulipas; en detrimento de la salud de los tamaulipecos desde luego.
Lo mismo va para el priista de San Luis Manuel Carreras, quien también tendría que subsidiar los servicios de salud que Tamaulipas le otorga a sus paisanos.
Eso si, ante todo la atención de pacientes debe ser garantizada sin importar códigos postales, como lo ha hecho Tamaulipas hasta ahora.
Geño, el revés…
La Suprema Corte de Justicia de la Nación desechó toda posibilidad de conocer el amparo que solicitó el ex gobernador de Tamaulipas Eugenio Hernández, quien en su alegato judicial reclamaba al presidente López Obrador y al canciller Marcelo Ebrard por no responderle su solicitud de reconsideración al proceso de extradición que está en marcha en su contra y que lo llevará a Estados Unidos donde será juzgado por varios delitos.
Con el revés de ayer, Geño ve cada vez más cerca su partida a tierras gringas, donde lo acusan de asociación delictuosa, operar un negocio de envío de dinero sin licencia y asociación delictuosa para cometer fraude bancario. Comentarios: meliton-garcia@hotmail.com Twitter: @melitong
Fuente: Expreso.press
