POR FERNANDO ACUÑA PIÑEIRO—
LA ALIANZA DE POLEVNSKY CON EL PAN GUASON, SE ESTÁ DERRUMBANDO—-
El Delegado de MORENA, Marco Cruz Martinez ya no quiere queso, sino salir de la ratonera azul, donde lo ha metido su jefa Yeidckol. Su silencio, su temor de que todo el teatrito se les caiga, es más que evidente. Hay muchas señales de peso para que esto ocurra. La principal es que, el monrealismo en Tamaulipas, desde un inicio ha tenido luz verde desde Palacio Nacional, para impulsar la Cuarta Transformación, iniciada con el tsunami del 2018. A partir del año pasado , hay indicaciones precisas de concluir con el cambio que quedó a medias en nuestro estado. O sea que el regreso de Alejandro Rojas Díaz Durán no fue por su cuenta , ni se manda solo.Todo obedece a un plan trazado desde las alturas del poder. Allá aquellos que no lo entiendan. Recientemente, desde su apoltronamiento cupular en el CEN de MORENA, la dirigente nacional Yeidckol Polevnski, arremetió en contra del que actualmente es considerado por propios y extraños, como el líder de la oposición real en Tamaulipas, Alejandro Rojas Díaz Durán.
Resulta por demás extraño que, en la antesala de la elección por las diputaciones locales en cinco estados panistas de la república, la señora Polevnsky, en lugar de cuestionar a los gobernadores azules, se dedica a fustigar a sus mismos correligionarios.De entrada, resulta absurdo y fuera de lugar que, la Presidenta de MORENA, haga sospechosamente a un lado su papel como crítica de los gobiernos, donde el morenismo es oposición. Y en lugar de eso, se dedique a golpetear a cuadros distinguidos de su mismo partido.
Algo anda muy mal. O bien, esta dama ya le agarró dinero a los gobernadores, (en Tamaulipas se habla de un cañonazo 50 millones), o bien Yeidckol quiere manejar a MORENA, como un club donde ella decide la membresía. Podrían ser las dos cosas.Lo cierto es que su rabiosa embestida contra sus propios compañeros de MORENA, sigue llamando la atención.
Es como si el dirigente nacional del PAN, Marko Cortéz, en lugar de criticar al gobierno en el poder, arremetiera contra los gobiernos locales de Acción Nacional, Así de incongruente y descabellada es la postura de doña Yeidckol.
Hay algo todavía peor:
Mientras que Polevsnky se hace de la vista gorda, y se niega a enderezar criticas contra los gobiernos panistas, y especialmente el tamaulipeco, no pasa día sin que los cabecistas dejen de atacar al sexenio obradorista.
Lo hacen desde todos los flancos, lo mismo enviando a grupos campesinos para que bloqueen carreteras, exigiendo respuestas del gobierno federal, que con manifestaciones en la Secretaría de Salud, donde supuestos funcionarios, ligados al programa PROSPERA, muestran pancartas, cuestionando severamente la Cuarta Transformación, y acusando al Presidente AMLO de que los dejó sin empleos.
Tal vez por situaciones como la anterior, Alejandro le recuerda a Polevnsky que la lucha por el poder, contra el PAN, incluye la crítica hacia el gobierno estatal en turno, pero se extraña de que, bajo el argumento de no intervenir en el proceso interno, ella no ha sido capaz hasta ahora, de enderezar el más leve señalamiento contra el sexenio de los vientos.
En este sentido, vemos que Polevnsky está traicionando al partido, que Andrés Manuel López Obrador puso en sus manos, pues está aplastando las aspiraciones de los amplios bastiones ciudadanos que, contribuyeron con sus votos al triunfo del obradorismo, en la pasada elección presidencial del 2018. Tal vez por ello, ya se habla de que en el próximo Consejo nacional, pedirán su destitución.
Otro Punto que ARDD rebate con singular claridad, es el relacionado con sus vínculos tamaulipecos:
“Tengo familia en Tamaulipas, (mi abuelo fue contador de la Compañía Petrolera, El Águila, y luego en PEMEX, y mi mamá creció en Tampico). La abuela de mi esposa nació en Tampico. Por lo tanto mis hijos llevan con orgullo, sangre tamaulipeca. Fui el Vicecoordinador de la Campaña presidencial de Andrés Manuel López Obrador, en la segunda Circunscripción, a cargo de de mi amigo y senador Ricardo Monreal, con extraordinarios resultados”.
“Se me acusa, señala Alejandro, de encabezar la rebelión de decenas de dirigentes de MORENA, que fueron excluidos para participar en las encuestas a las diputaciones locales, en el estado de Tamaulipas, y que en su lugar incluyeron a muchos personajes ligados al gobierno del estado”.
Se declara culpable, de apoyar a la militancia de MORENA, y a quienes asumen su papel de verdaderos opositores y críticos del PAN-gobierno.
Más adelante, aporta ejemplos de los atropellos de Yeidckol, que ya todos conocemos, no solo en Tamaulipas, sino en todo el país. Por cierto, se sabe que en Puebla, por órdenes de mero arriba, ya le están dando mucho juego al precandidato Alejandro Armenta, pues es el que garantiza el triunfo, como candidato de la unidad y no de la crispación, como lo es Barbosa. El caso Puebla, podría ser el principio del fin para Polevnsky en MORENA. Yeidckol está convertida en juez y parte de los procesos internos. Pisotea a los liderazgos que en el 2018, llevaron al triunfo a Andrés Manuel López Obrador.
Cierto es que, como dijo alguna vez Andrés Manuel, MORENA no tiene dueño, pero hoy Yeidckol maneja esta organización, como que si fuese su empresa particular. Muy pronto, la misma dinámica de la democracia interna , le cobrará la factura.
