Maestra exige justicia tras ser despojada de su vivienda y golpeada por su expareja sentimental
Por: José Juan Tomás
Tampico, Tamps.– A más de un año de haber sido despojada de la vivienda que con tanto esfuerzo adquirió, la maestra Ericka Vidal Patiño continúa en la lucha por recuperar lo que le pertenece. Señala a su expareja sentimental como responsable no solo de arrebatarle su patrimonio, sino también de ejercer violencia física y psicológica en su contra.
La docente relató que la vivienda, ubicada en este puerto, todavía se encuentra bajo un esquema de pago, sin embargo, desde hace meses fue tomada por su expareja, quien además la ha amenazado con despojarla de otros bienes familiares.
“Él ya me amenazó, me dijo que incluso puede quitarme hasta la casa de mi madre. Me doy cuenta de que se está saliendo con la suya y temo por mi vida, ya que en la madrugada, cuando se enteró de que le interpuse la demanda, apedrearon la casa de mi mamá”, denunció con voz entrecortada.
Fiscalía omisa ante la denuncia
Pese a que existe una denuncia formal ante la Fiscalía General de Justicia del Estado de Tamaulipas, Ericka acusa que las autoridades han sido omisas y no se observan avances en la investigación. Afirma que la indiferencia institucional ha permitido que su agresor continúe libre y que, junto a su hijo, mantenga una serie de amenazas constantes en su contra.
“La demanda está interpuesta desde hace meses, pero no hay resultados. Ellos siguen hostigándome y yo sigo esperando que alguien haga justicia. No quiero que este caso termine en una tragedia”, lamentó la afectada.
Víctima de violencia de género
El caso de Ericka refleja una problemática recurrente en Tamaulipas y en el país: mujeres que, además de ser víctimas de violencia intrafamiliar, enfrentan la falta de respuesta por parte de las autoridades encargadas de brindarles protección.
Colectivos feministas de la zona sur han señalado en repetidas ocasiones que los procesos legales suelen estancarse, dejando a las víctimas en un estado de indefensión que las expone aún más al hostigamiento y a posibles agresiones fatales.
Llamado a la justicia
La maestra pidió al Gobierno del Estado y a las instancias correspondientes garantizar su seguridad y restituirle la vivienda que legítimamente le pertenece. “No estoy pidiendo nada que no sea mío, solo quiero vivir en paz, recuperar mi casa y que mis derechos como mujer y ciudadana sean respetados”, subrayó.
Mientras tanto, la docente continúa resguardándose en casa de familiares, a la espera de que las autoridades actúen y pongan fin a una situación que, asegura, le ha arrebatado tranquilidad, patrimonio y salud emocional.
