Mujeres lideran equipos en la construcción de la autopista Mante–Ocampo–Tula

Por Margil Zapata.
Ciudad Victoria, Tamaulipas.- En la construcción de la autopista Mante–Ocampo–Tula y del túnel «Américo Villarreal Guerra», una de las obras de infraestructura más relevantes en Tamaulipas, la presencia de mujeres, aunque aún minoritaria, está marcando una diferencia significativa en un entorno tradicionalmente dominado por hombres.
De los cerca de 400 trabajadores que conforman el equipo en esta obra, solo cuatro son mujeres. Sin embargo, su participación no pasa desapercibida. La ingeniera Estefani Castro y la licenciada Lluvia Seleno han asumido con firmeza roles de responsabilidad que implican el liderazgo de equipos mayoritariamente masculinos.
«Trabajar con más de 200 hombres sí genera cierta adrenalina. Somos pocas mujeres y estamos a cargo de ellos, así que a veces es complicado, pero hasta ahora nos hemos sabido adaptar bien», comentó Estefani, quien se desempeña como auxiliar de maquinaria y coordina directamente al personal del operativo.
Por su parte, Lluvia Seleno, auxiliar del ingeniero encargado del portal de entrada, lleva casi dos años en la obra. Reconoció que el inicio fue lo más difícil: «Entré con temor a dar órdenes, pero mi jefe me dijo que debía creerme que era la encargada. Poco a poco, los compañeros entendieron que también estamos aquí para trabajar con ellos».
Ambas coinciden en que, aunque hubo momentos en los que pensaron en renunciar, lograron sobrellevar los retos del entorno laboral y ganarse el respeto de sus compañeros.
Además de compartir su experiencia, lanzaron un mensaje a otras mujeres interesadas en el ámbito de la construcción.
«Nunca había trabajado en este tipo de obras, y ha sido una experiencia muy bonita. Aprendes mucho, tanto de los obreros como de los ingenieros. Solo hay que quitarse el miedo», señaló Lluvia.
Estefani agregó: «A las mujeres que quieran estudiar alguna carrera relacionada con la construcción, las animo a que se animen. Este es un buen ámbito y, al menos en nuestro caso, nunca nos han faltado al respeto».
Finalmente, vale destacar que su testimonio —y participación— refleja cómo, paso a paso, las mujeres están ganando terreno en sectores clave para el desarrollo regional, demostrando que el liderazgo y la capacidad no tienen género.