Por: Vicente Hernández
“Del hablador he aprendido a callar; del intolerante, a ser indulgente, y del malévolo a tratar a los demás con amabilidad. Y por curioso que parezca, no siento ninguna gratitud hacia esos maestros.”
«Gibran, Khalil»
Fue un 30 de diciembre de 1943 cuando se fundó el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), que en su mejor momento llego a ser la organización sindical de maestros más grande de América Latina, integrado por diversas agrupaciones de maestros y demás trabajadores del sistema educativo, bajo el auspicio gubernamental del Partido de la Revolución Mexicana, precursor del Partido Revolucionario Institucional (PRI), quien desde su fundación se dio un claro amasiato con los gobiernos priistas subsecuentes, y aunque este sindicato presumía de revolucionario, el escritor michoacano Isidro Castillo Pérez, menciona que a partir de la creación del SNTE, el sindicalismo magisterial sólo ha sido revolucionario de nombre, ya que la revolución sólo está presente en libros, prensa y discurso, nada más.
Pero como en todas las organizaciones sean sindicales, religiosas o políticas, siempre hay descontentos y divisiones, provocadas en cierta medida por la corrupción de sus líderes, por lo que en el año de 1979 en la ciudad de Tuxtla Gutiérrez Chiapas, un nutrido grupo de disidentes del SENTE fundan la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), y como ya se anotó, esta nueva organización magisterial surgió como respuesta a la necesidad de enfrentar el control corporativo que el SNTE mantenía en estrecha alianza con el Estado Mexicano, por lo que esta organización se autoidentifica como un movimiento democrático, popular y clasista, y mantiene una postura anticorporativa y antiestatal, además tiene cercanía a ideologías de izquierda, marxismo y el guevarismo, hasta las luchas del movimiento indígena, o sea todo debidamente amalgamado para lucir como una Coordinadora progresista, pero quizás fuera de sus agremiados, el ciudadano no piense de la misma manera.
Los postulados que originalmente enarbolaban los Centistas eran los de luchar por la democratización del SNTE, defender los derechos laborales de los maestros, y mejorar las condiciones educativas en el país, también buscaban una educación pública, gratuita y de calidad para todos, solo que algo paso desde aquel 1979 a este 2025, porque el SENTE sigue negociando con el gobierno, los derechos laborales de los maestros son respetados, y eso de mejorar las condiciones educativas en el país ¿De cuál país? en cuanto a una educación gratuita, ya la tenemos, ¿de calidad? como puedes ser posible esto último, si los maestros de esta Coordinadora en lugar de estar dando clases, se la pasan la mayor parte del tiempo en plantones, dejando a la deriva educativa a millones de niños, que son los que finalmente están pagando los platos rotos por sus rijosos, revoltosos y valemadristas maestros.
Tan solo en este año, desde el pasado 15 de mayo (Día del Maestro), la CNTE ha llevado a cabo una huelga indefinida, con lesivas movilizaciones, bloqueos carreteros, en instancias de gobierno, estaciones del Metro y avenidas principales de la CDMX, que buscan presionar al gobierno para que atienda sus demandas, entre las que destaca la derogación de la Ley del ISSSTE de 2007, y regresar al antiguo sistema de pensiones, que no utilizaba las Afores, estos bloqueos han generado una serie de protestas de parte de la ciudadanía, y ha provocado enfrentamientos entre maestros y ciudadanos, que se están viendo seriamente afectados en su libre tránsito.
A la fecha la CNTE ha repetido los vicios que antes le combatió al SENTE, aunque a lo largo del tiempo haya mantenido una retórica de combate disidente, adornada con una jerga emparentada con la ideología revolucionaria de la lucha de clases, esta fachada les sirvió para congraciarse con el entonces candidato a la presidencia de la republica Andrés Manuel López Obrador, que inteligentemente los aprovecho para ganar las elecciones, y ya en la presidencia los mantuvo a raya con millonarias aportaciones a los bolsillos de sus dirigentes.
La misma estrategia utilizo la entonces candidata Claudia Sheinbaum, cuando en campaña en varios discursos se comprometió a derogar la Ley del ISSSTE, que se había promulgado en 2007 siendo presidente Felipe Calderón Hinojosa, por considerarla neoliberal, pero en la actualidad aunque la presidenta reconoce que esta promesa si la hizo, ahora dice que no se puede regresar antes de la ley del 2007 porque no alcanzan los recursos, y mientras miles de maestros protestan por supuestos atropellos a sus derechos laborales, este paro magisterial ha dejado sin clases a casi ocho millones de niños y adolescentes inscritos en escuelas públicas, a pero eso sí, los maestros exigen el 100 % de aumento salarial, mientras cobraran sus quincenas como si estuvieran dando clases.
Y como colofón a este texto surge las interrogantes ¿Quién esta financiando estos bloqueos de mas de 10 mil maestros desplazados por varios sectores de la CDMX quien paga los 10 mil almuerzos, comidas, cenas diarias y los traslados de maestros desde varios puntos del territorio nacional? -Ahi se los dejo de tarea
