Sangre Mexicana: La dignidad no se toca
Alejandro Mares Berrones
“México no es colonia de nadie, ni protectorado de nadie; no permitiremos sometimiento, injerencismo ni racismo; podrán amenazar, pero no violar soberanía, ni dignidad”; esas fueron las palabras que pronunció la Presidenta de los Estados Unidos Mexicanos, la doctora Claudia Sheinbaum Pardo, en la conmemoración del 108 aniversario de la Carta Magna.
Este mensaje llevaba destinatario y de seguro fue recibido en Washington, se lo tuvieron que traducir al inglés a Donald Trump. Que valiente es nuestra Presidenta, como dice la canción que valor de mujer.
Cuando la escuche hablar, se me vino a la mente aquel pasaje bíblico de Goliat contra David; el filisteo no solo amenazaba al judío, también se burlaba de él, de que lo mataría y que su carne la echaría a los perros.
Trump, debe de saber que la doctora Claudia Sheinbaum Pardo, no es cualquier mexicana, por sus venas corre sangre sagrada; además lastimar la dignidad del pueblo de México, sería el peor error que estaría cometiendo el Presidente de USA.
La presidenta también les recordó a los gringos, que gran parte de su territorio nos lo arrebataron, pero lo que no nos van a poder quitar nunca es nuestra soberanía y nuestra dignidad; esas palabras en el corazón de un mexicano, son sin duda adrenalina pura y rompen con toda desunión, cohesionando a un pueblo dividido por ideologías políticas.
Los mexicanos no somos de guerras; es cierto, tenemos problemas de delincuencia organizada, que cada vez los cárteles usan mayor poder de fuego, también lo es y ahora hasta artefactos explosivos utilizan; pero precisamente por ser un país humanista, como lo dice nuestro himno nacional y nuestra propia Constitución General, la que se tendría que modificar o reformar, para que nuestras fuerzas armadas, saquen su artillería y caballería, la que solo se les permite usar en tiempos de guerra.
Por eso, el mensaje de la doctora Sheinbaum, “colaboración si, sometimiento no”, pero la verdad, no se necesita ni siquiera la colaboración de los gringos; nuestro gobierno, puede dar el salto, no como lo hizo Felipe Calderón, sino haciendo los ajustes a nuestra Ley Suprema, para que las Fuerzas Armadas, usen armamento bélico y puedan someter a la delincuencia organizada, que ahora hasta drones con explosivos usan para enfrentar a nuestros héroes militares.
La colaboración y coordinación debe ser mutua, nuestro gobierno combatir en su territorio a los poderosos Cárteles; porque no, con el apoyo de Washington, siempre y cuando, también los gringos dejen de vender las armas largas, municiones, explosivos y lanza cohetes a la delincuencia organizada.
El tema del fentanilo, es otro de los argumentos de Trump; sin embargo, ¿quién lo consume?, pues precisamente ellos; en nuestro país no se nos están muriendo nuestras nuevas generaciones, como les está pasando; México no les va a solucionar sus problemas internos, tampoco es directamente culpable de lo que les ocurre.
Tachar a México como un narco-gobierno; es sinónimo, de señalar a los Estados Unidos como una nación de adictos, pero ninguno de los dos son ambas cosas, todo lo contrario, nuestra nación es grande, como lo es USA; no porque Trump represente a un país poderoso, va a querer intimidar; que no se le olvide, lo que le pasó con Cuba, un país mucho más pequeño que el nuestro, una isla, y nunca se doblegó.
Nuestra presidenta, en el Día de la Constitución, anunció dos importantes iniciativas de ley, reformas a la misma: la No Reelección, a ningún puesto de elección popular; de seguro la doctora Claudia Sheinbaum, en su campaña se dio cuenta de lo sinvergüenza que resultaron aquellos alcaldes que tuvieron la oportunidad de reelegirse.
La otra reforma, será de combate al nepotismo, para que ningún familiar pueda suceder de manera inmediata a otro, tratándose de un puesto de elección popular; en Tamaulipas, en Reynosa para ser precisos, la familia Peña Ortiz, llevan 12 años manejando el presupuesto de la Presidencia Municipal, hablamos de miles de millones de pesos; primero lo hizo Maki Ortiz, como alcaldesa panista, hoy senadora del Partido Verde y actualmente su hijo Makito Peña, así de ese tamaño, está las cosas en los municipios de la república.
Aunque creo, con mucho respeto, que a nuestra presidenta le faltó una tercera reforma, que es precisamente, otorgarle a nuestras Fuerzas Armadas, las facultades para que utilicen el armamento bélico suficiente para enfrentar a los cárteles; ya ven los gringos, ya empezaron “acalambrar” con su aviones y sus vuelos de reconocimiento en Sinaloa y otros estados.
Por último, el pasaje bíblico termina, en que David, con una honda y una piedra derrotó a Goliat, quien era un imponente gigante, armado con escudo y lanza, al final mordió el polvo; no es por la fuerza, sino por la razón y el win win entre nuestras naciones, para que todo vuelva a la tranquilidad.