Ciro : ¿ En qué trabaja el muchacho ?
Sin chamba desde hace 6 años pero ni ganas de trabajar como cerillito de Oxxo tiene.
Crónicas del Sur; por: José Juan Tomas
El irreverente y chapulín Altamirense, Ciro Hernández Arteaga, lleva seis años desempleado y no se le ven ganas de querer trabajar ni como cerillito del Oxxo.
Logró colarse al municipio de Altamira como contralor municipal, después fue tesorero, síndico, gracias al Partido Revolucionario Institucional ( PRI ), pero se aferró a querer ser alcalde, pero nunca lo iban a dejar los Dinosaurios y vieja guardia del tricolor, por qué no era bien visto, pues lo tragaban pero a la vez lo vomitaban.
Y al ver que ya no podía seguir viviendo de este partido, pues fue parte de los priistas traidores que en el 2016, le dieron una puñalada a este partido que le dio de comer por más de 15 años y lo apuñalo a cambio de una Diputación local por el PAN, la cual ganó gracias a su padrino Pancho Cabeza de Vaca
Y hay que ser muy objetivos al criticar a Ciro “el chapulín” Arteaga, que hay que reconocer que ha ayudado a mucha raza y que ha sido sensible a muchos casos sociales, pero su peso político nunca le ha alcanzado para ganar, pues llegó al Congreso local gracias a su padrino político Cabeza de Vaca, no ganó por él, que ni se la crea.
Y los panuchos le cumplieron su gran sueño de ser candidato a la alcaldía de Altamira, pero primero lo chiflaron y después lo traicionaron, pues lo dejaron solo para que perdiera y perdió dejándolo asi como novia de rancho vestido y caliente.
Hace unos meses ejecutó su segunda traición política, ahora contra el PAN, y se puso de rodillas ante los guindas, y eso lo ha mantenido “fresco como una lechuga” nadando de muertito y pateando el bote.
El señor ex monaguillo se sigue dando vida de rico a costillas de la política, y por lo visto, de esta manera quiere continuar por el resto de su vida.
Y se nota que la habido muy bien, que no se ha preocupado ni por emprender ni un puesto de paletas en su colonia.
Se niega a ser asalariado, pero mucho más se niega a salir de la bendita nómina de papá Gobierno, por eso ahora se muestra como un empleado del sistema, al grado que hasta se tiene que desmañanar para estar cumpliendo con sus acuerdos monetarios.
Ya se acostumbró a vender sus porras como sus aplausos en dólares y canjearlos también por puestos para sus carga maletas
Lamentablemente este chapulín siempre termina cayéndole gordo a la raza y no dude que en el 2027 se va a volver a encuerdar solito para buscar que le regale Morena la candidatura o una diputación.