Por Redacción Sentido Común.
Ciudad de México, 27 de diciembre de 2024. – Debido a una disminución del 52% en el presupuesto aprobado por el Congreso para la elección judicial, el Instituto Nacional Electoral (INE) ha decidido instalar solo 73 mil 850 casillas, lo que representa un 43% de las 172 mil originalmente previstas. Esta reducción en el número de casillas es una respuesta al recorte de fondos, que afectará tanto la logística electoral como la capacidad del INE para promover la participación ciudadana.
La decisión fue aprobada por la Comisión Organizadora del proceso judicial del INE y está pendiente de ratificación por el Consejo General del organismo electoral. El nuevo planteamiento también implica la colocación de una única urna por casilla, en lugar de una por cada cargo en disputa, dado que las elecciones judiciales incluirán a Ministros, Jueces y Magistrados. Este ajuste prevé que, en promedio, haya una casilla por cada una de las 70 mil secciones electorales del país.
Además, el INE reducirá en un 58% el número de capacitadores y supervisores electorales, pasando de 50 mil 613 a 29 mil 656, con el objetivo de ahorrar aproximadamente 2,500 millones de pesos. También se contempla una reducción significativa en los recursos destinados a la promoción de la elección, lo que podría generar un ambiente de baja participación, que algunos analistas prevén podría rondar el 10%.
El ex presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde, y el analista electoral Arturo Espinosa Silis advirtieron que la combinación de la reducción de casillas, la falta de tiempo para organizar el proceso y la complejidad de las boletas podría generar un alto número de votos nulos y desinformación entre los electores. Además, señalaron que el INE se enfrenta al desafío de organizar una elección judicial con un presupuesto limitado, lo que podría comprometer la calidad y equidad del proceso.
El recorte de presupuesto también pone en duda si el INE podrá mantener los estándares de las elecciones federales anteriores, especialmente considerando que las recientes consultas impulsadas por la 4T, como la Revocación de Mandato y la Consulta Popular, tuvieron una baja participación, con solo un 17% y 7% respectivamente, pese a tener una sola boleta con una pregunta.
Este escenario genera preocupación sobre la efectividad del proceso electoral y la transparencia en la elección judicial, al tiempo que se cuestiona si la falta de recursos afectará la credibilidad del INE y la confianza de la ciudadanía en el sistema electoral.
